El Liverpool, líder de la tabla clasificatoria de esta primera fase del nuevo formato de la Champions League, superó con autoridad a los de Ancelotti en una noche que salió demasiado cara y en la que volvieron a evidenciar el peso de sus bajas. El juego de los blancos fue totalmente ineficaz y Courtois fue el mejor del equipo evitando que la tragedia en el marcador fuera mayor.
El Liverpool fue mucho más ofensivo y lo demostró con distintas ocasiones que no pudo materializar. El Real Madrid no encontró la manera de neutralizar al rival y hacerse con el balón. De este modo, el partido llegaría al descanso sin goles. En el segundo acto, Mac Allister dio la ventaja a los Reds y solo unos minutos más tardes crecían las malas noticias para el conjunto blanco. Camavinga, que estaba siendo de lo mejor del encuentro, abandonó el terreno de juego por lesión. Una nueva baja que se suma a las seis que ya tenía y que provocan más dolores de cabeza para el técnico italiano.
El Real Madrid tuvo la oportunidad de poner en tablas un partido que se le escapaba, pero un irreconocible Mbappé erró la pena máxima. También Salah no pudo convertir desde los once metros. En el 76’, Cody Gakpo marcó el segundo para sentenciar un partido en el que llevó la iniciativa desde el inicio.
Con esta nueva derrota en Europa, la tercera de sus cinco partidos disputados, al Madrid se le antoja casi imposible poder terminar la primera fase entre los ocho primeros. De hecho, en estos momentos y a falta de tres jornadas para concluir, se ubica en la última plaza de los playoff. En sus próximos compromisos, visitará a la Atalanta, recibirá al Salzburgo y disputará la última cita a finales de enero ante el Brest.
