La irrupción de Federico Macheda en la élite fue extraordinaria. Con tan solo 17 años, fue clave en la Premier conquistada por el Manchester United en 2009. Su dos goles milagrosos ante Aston Villa -un golazo soberbio, uba obra de arte- y Sunderland en los instantes finales de sendos encuentros fueron mágicos, especiales y trascendentales para la consecución del título. Old Trafford soñaba en grande y se frotaba las manos con su nuevo joven talento italiano.
«Federico es un jugador TOP cerca del área. Tiene un gran instinto para el gol. No parece que tenga 17 años, parece un maduro de 28». Estas fueron, más o menos, los halagos en los que se deshizo Sir Alex Ferguson sobre su nuevo delantero. La salida del equipo de Cristiano Ronaldo era un hecho y tanto club como afición -acostumbrados a ganar- necesitaban un nuevo ídolo en quien creer. Ese era Macheda. Y su estreno en la élite fue paralelo al del luso, mejor, incluso.
Pero el ariete italiano nunca pudo con esa presión, esas expectativas generadas y su carrera ha sido una absoluta decepción. Después de no triunfar en Manchester y vagar por Sampdoria, Stuttgart o Cardiff City, Macheda ha firmado por un club de la segunda división italiana: por el Novara Calcio. Un talento desaprovechado, un diamante que nadie pudo pulir, de la cúspide de la pirámide al más óscuro fondo, la historia de la carrera de Federico Macheda.