Con el empate cosechado por el Real Madrid (y gracias) ante un dignísimo Club de Fútbol Fuenlabrada, que milita en la categoría de bronce, en la vuelta de los dieciseisavos de Copa, varios son los señalados por la parroquia madridista tras su flojo rendimiento sobre el verde del Santiago Bernabéu.
Desde las gradas blancas uno de los dedos apunta hacia el lateral izquierdo Theo Hernández, quien firmó por el Real Madrid el pasado verano por una cantidad de 30 millones de euros procedente del Atlético de Madrid. El futbolista que se catapultó firmando una temporada excelsa en Vitoria, ahora se ve relegado en el banquillo blanco y es que su nivel, cuando Zinedine Zidane le ha dado la oportunidad, deja mucho que desear. Potencia, desborde y disparo son algunas de las características que mejor definen a este joven francés de 20 años.
Sin Marcelo en la convocatoria, Zidane apostaba por Theo para propulsar el ataque madridista, pero apenas dio muestras de peligrosidad en sus escasas llegadas al área rival, o bien por mérito del cuadro fuenlabreño o por su bajo nivel de forma. Oportunidad que tuvo y en la que no brilló con el objetivo de intentar mostrar su carta de presentación para inquietar a su compañero Marcelo y hacerle saber al técnico galo que puede contar con él.
Su actuación no fue la que todo el mundo esperaba. Theo perdió hasta en 13 ocasiones el balón, perdiendo el 71,4% de los duelos ante los jugadores del Fuenlabrada. Un dato que corre a su favor fue el acierto a la hora de los pases, que completó 55 de 60. Más allá de números, fueron las sensaciones con la que al término del partido el lateral zurdo no firmó su mejor partido como madridista.
La afición del Real Madrid espera mucho del que se se supone que debe ser el heredero de la banda que pertenece a Marcelo, una posición que mientras no mejore el francés, seguirá siendo todo el tiempo que quiera del brasileño. ¿Sustituto de garantías? El tiempo dirá.
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