El año pasado, Ian Stannard realizó una hazaña. Con su característico pedaleo tozudo, con tesón y la mirada clavada al frente, el ciclista inglés vencía el Omloop Het Nieuwsblad después de realizar un esfuerzo ímprobo durante los últimos kilómetros, cubierto de agua y barro, y superar en el sprint a Greg Van Avermaet, a priori mucho más rápido que él. Era la primera gran victoria como profesional de Stannard, con 27 años.
364 días después, Stannard redobló la apuesta. El más difícil todavía. Para volver a ganar. Un día más soleado esta vez, que Tom Boonen vio propicio para conseguir su primera victoria en la carrera que tradicionalmente inaugura la temporada de clásicas de primavera, entre cotas y adoquines. La leyenda belga seguirá esperando.
Y eso que no paró en todo el día. En Taaienberg, su cota y santuario, Boonen ya estiró y redujo el grupo principal con enorme facilidad. Posteriormente, fue en Leberg cuando realizó el corte definitivo junto a su compañero Niki Terpstra, vigente campeón en Roubaix. Boonen, Terpstra, Vandenbergh y el ínclito Stannard. Tres del equipo Etixx-Quick Step.
Una situación inmejorable que Stannard se encargó de echar el traste. La presión de Sep Vanmarcke, tan protagonista sobre el pavés como incapaz de ganar, obligó a los tres del Etixx a trabajar duro mientras el inglés se limitaba a esperar a rueda. El equipo belga no supo aprovechar la ventajosa situación en los últimos kilómetros a causa de una pobre estrategia y de la perseverancia de Stannard, cuyo ataque final solo pudo seguir Terpstra, que caería rendido en el sprint final.
Las credenciales del Sky de cara a Roubaix
Ian Stannard comienza esta temporada igual que hizo la anterior. Sin embargo, en 2014 no volvió a realizar ningún buen resultado sobre el adoquín y se rompió una vértebra tras caer en Gent-Wevelgem, dando al traste con sus objetivos. Y es que pese a la gran potencia del equipo Sky, con varios especialistas clasicómanos, nunca ha realizado una buena campaña de primavera desde su creación en 2011. De hecho, sus únicos triunfos han sido siempre en Omloop, con Flecha (2010) y el propio Stannard (2014-2015).
Anduvo el equipo Sky muy activo durante toda la carrera en Omloop. Controlando el pelotón durante toda la carrera hasta el ataque de Etixx, con Bradley Wiggins mostrándose en los primeros tramos de pavés y Luke Rowe muy activo y al ataque en Wolvenberg, amén del triunfador Stannard. Junto a ellos, Sky cuenta con Geraint Thomas, Bernard Eisel o Christian Knees, con una experiencia solvente en el adoquín.
Y es que el primer gran objetivo del equipo Team Sky es ganar la París-Roubaix con Bradley Wiggins, en la que será una de sus últimas carreras antes de volver a la pista. Con un triunfo así, Wiggins cerraría un palmarés de altura, con Tour de Francia, el Mundial contrarreloj o el oro olímpico entre otros triunfos.
De este modo, Sky enseña los dientes de cara a Roubaix. Cuenta con los pobres precedentes de los últimos años en las clásicas, si bien potencial nunca le ha faltado ni le falta esta temporada. Y además, este año, cuentan con un clarísimo objetivo, marcando en rojo por ciclistas y equipo: el domingo 12 de abril.