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Betis

¡Qué arte, miarma!

Tengo la certeza de que ningún bético va a leer esto hasta que pasen las horas y sobrevivan al escaso descanso tras una noche inolvidable. Pase histórico a la final de la Conference League y la Feria en Sevilla. Como podéis imaginar, con una combinación de tal índole, la cosa se complica. Cualquiera querría tocar las palmas.

Santa Maria del Fiore acogió las plegarias verdiblancas. El Real Betis lo logró en la cuna del arte. Miguel Ángel, Giotto, Boticelli, Leonardo Da Vinci, Caravaggio o Antony que, con un libre directo que limpió las telarañas, pintó un lienzo que podría dormir en la Galería Uffizi. De título: Iluminado.

Quiso la Fiorentina, o más bien la cabeza de Gosens, alagar hasta la prórroga, porque el Artemio Franchi creía que el factor campo le impulsaría hasta Breslavia, pero el Betis, como avisó Isco, había llegado engorilado. Lo sentenció su poesía en el césped; la rima, el ritmo, la belleza. Aitor Ruibal, profesional polivalente, se colocó su antiguo traje de delantero y ejerció de 9; control, giro y pase filtrado para desencadenar el gol definitivo. Abde colocó un candado en el Ponte Vecchio para dejar huella de esta historia de amor.

Antony, que ya es Antonio en Sevilla, lloraba tras el partido. Su vida ha dado un giro de 180 grados y, al calor de la afición, ha espantado todas sus sombras, recobrando la mejor de las versiones de su talento. La cesión del extremo es como un amor de verano; mágico e intenso, que, de momento, tiene una fecha de caducidad a la que ninguna de las partes quiere presentarse.

Pellegrini hizo oídos sordos a ese supuesto cambio de ciclo y respondió una vez más. Un derbi que se le resistía, la quinta clasificación para disputar competición continental y la primera final europea de la historia del club verdiblanco. El Ingeniero, y su chándal, lo vaticinaron. Le mandó un mensaje hace tiempo a Enzo Maresca, a quién entrenó en el Málaga, para decirle que se encontrarían en la final. El destino lo ha escrito, el Betis y el Chelsea volverán a encontrarse 20 años después. Esta vez, sin los goles de Drogba y Oliveira, y con la intención de vivir, por primera vez, esa gloria indescriptible que tanto desean en Heliópolis.

Editora en SpheraSports. Especialista en Scouting y análisis de juego por MBPSchool. Sport Social Media. Eventos Deportivos

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