Existen momentos determinados, lugares concretos y sucesos históricos. Todo unido forman parte de recuerdos, de viejas añoranzas que quedan grabadas en las mentes de los aficionados del fútbol. Para bien, para mal. Unos fueron vencedores, otros fueron los derrotados. Unos sonríen por recordar aquello, mientras que los otros sienten un dolor de estómago cuando sale el tema.
La jornada de Cuartos de Final en la presente edición de FA Cup se cierra con el gran plato fuerte. El gran partido, el que tiene los focos cálidos sobre su estadio, el que generará los grandes seguimientos populares. Old Trafford es el estadio que vivirá la gran cita, con Manchester United y Arsenal como actores protagonistas. Uno de los grandes duelos del fútbol inglés por una década de los 2000 que dejó partidos vibrantes, imborrables, que son recordados con añoranza cuando uno se abre Youtube para viajar a épocas pasadas.
El Arsenal vuelve un año más a Old Trafford. Dicen, es el Teatro de los Sueños, pero para la afición del Norte de Londres se convertiría en 2004 en pesadillas, en desilusiones, incluso en fecha importante que marcaría un antes y un después.
La temporada 2003-04 entraría en la Historia. El fútbol inglés viviría de forma atónita, a la vez que excitante, cómo aquella plantilla del Arsenal dirigida por Arsène Wenger acabaría Campeón de la Premier League imbatido, sin perder un sólo partido en cada una de las 38 jornadas disputadas. Nacieron los Invencibles, el equipo imbatido, el único equipo que tiene en sus vitrinas un precioso trofeo dorado, por su histórica consecución.
La vida siguió a partir de allí, y la racha se extendió hasta los 49 partidos. Es decir, encadenaron más de una temporada sin perder. 38 partidos 2003/04 más 11 disputadas en la campaña 2004/05. Pero todo acabó. Todo tuvo un final. Una racha temporal que duró 2 años, 5 meses y 9 días. Ocurrió en Old Trafford, donde vuelve el Arsenal un año más.
Sí, los Invencibles cayeron. El Manchester United 2004/05 adquirió la medalla popular del equipo capaz de vencer a los Invencibles, de hacer caer al equipo imbatido en Inglaterra. Nadie podía con ellos, nadie podía ganarles, pero fueron los muchachos de Sir Alex Ferguson. La rivalidad entre ambos equipos fue a más. Los de Manchester eran potencia absoluta, y la gran dinámica deportiva de los londinenses hizo que se creara, así, una rivalidad moderna.
Ocurrió el 24 de Octubre de 2004, en Old Trafford, ante 67.862 personas que querían ver aquello, ver si era posible batir al equipo imbatido. Numerosos equipos lo habían intentado, incluído el Manchester United la anterior temporada. El Arsenal llegaba con una racha de 49 partidos ligueros sin perder, y buscaban la bonita y redonda cifra de 50, pero debían hacerlo en uno de los estadios más imponentes del fútbol mundial.
Wayne Rooney ya era el joven delantero descarado que había fichado el Manchester United, y en el bando contrario Arsène Wenger ya entrenaba al Arsenal. Los dos únicos ‘supervivientes’ de aquella histórica cita.
Las previas lo presentaban a bombo y platillo como «The Battle of Manchester«, pero acabaría convirtiéndose en «The Battle of the Buffet«. Era el gran partido. El Manchester United ganaría, por fin, al Arsenal por 2-0, con goles de Ruud van Nistelrooy de penalti (minuto 73) y de Wayne Rooney (92).
Old Trafford escribiría una página histórica en el fútbol inglés. El Arsenal de los Invencibles, uno de los mejores equipos de la historia del campeonato, había perdido, había caído en un partido liguero, dejando en 49 la cifra de partidos consecutivos sin perder.
El Arsenal vuelve a Manchester, vuelve a Old Trafford, donde escribió de forma involuntaria su página más triste, a la vez que histórica. Allí perdió la mejor plantilla que se recuerda en el club. En la actualidad, poco tienen que ver ambas plantillas con aquel romanticismo que se respiraba en el futbol de las Islas Británicas, pero volverán a enfrentarse por un puesto en Semifinales de la FA Cup.