El nuevo sport de las Guerreras evidenciaba la complejidad emocional tras los últimos resultados; con una actuación lejos de la deseada en los Juegos Olímpicos de París. Su nombre, ‘Renacer’, y su conexión con afrontar la realidad, invitan a la convicción de unas jugadoras que buscan escapar de los fantasmas en Campeonato de Europa de balonmano femenino que se celebra en Suiza, Hungría y Austria.
España, en la acción, ha empezado con buen pie, con un resultado a favor ante Portugal (30-24) que dan continuidad a las sensaciones del torneo preparatorio. Las de Ambros Martín se mostraron contundentes en el inicio cuando lograron aventajar a su rival por 2-0 y no dejaron que las portuguesas vieran portería hasta pasados los primeros cinco minutos. Sin embargo, el guion cambio, y las españolas encajaron cinco goles sin materializar ninguno a favor. España buscó su respuesta, las tendencias se repartieron y el partido llego al descanso con un marcador en el que España perdía por 29-31.
La segunda parte fue vital para la victoria. La selección, a falta de 13 minutos para el final, logró una ventaja de tres goles por primera vez, y se aferró a esa renta para certificar una victoria en la que brilló el ataque de Campos, Arcos y Somaza. Aguantó el combinado español, resistió en la adversidad y aprovechó los nervios de su rival plasmados en su imprecisión para imponerse en el resultado final.
La próxima cita de España será este sábado a las 18:00h ante Francia; actual campeona de Europa y medalla de plata en los Juegos Olímpicos de París. Aunque el duelo evidencie la máxima dificultad, las españolas se afianzaran a sus recuerdos más recientes, donde ganaron a las francesas en la preparación para el europeo.