Está muy bien lo de desconectar del fútbol, pero sin pasarse. Qué ganas de Liga había. Vuelve la pelea por el título, por Europa y por la salvación; pero vuelve, sobre todo, la ilusión por ver a tu equipo cada fin de semana. Con el regreso de la competición, en este artículo me planteo tres preguntas que probablemente me dejarán en evidencia cuando termine la temporada.
¿Esta Liga será un mano a mano hasta el final entre Barça y Real Madrid?
Tras un mercado de fichajes tan sorprendente como espectacular, el Barça va a por todo esta temporada. Y no es un decir, ya que la inversión hecha obliga a ello y sitúa las expectativas muy elevadas. Aunque no conviene sacar al Atlético de Simeone de ninguna ecuación, es lógico que tras fichajes como los de Lewandowski o Koundé, la presión de pelearle el título al campeón sea azulgrana. Dicho esto, resulta cómico leer que el Barça asusta al Real Madrid. Estamos hablando del vigente campeón de Liga y de Europa, que además se ha reforzado este verano y cuenta con jóvenes como Camavinga, Valverde, Rodrygo o Vinicius que están logrando que el equipo dependa cada vez menos de la vieja guardia. Pero volviendo a la pregunta, mi sensación es que solo el Barça podrá aguantar el tirón de este Real Madrid tan sólido, fiable y fuerte en las áreas. Nunca hay que descartar al Atlético, pero es una realidad que su plantilla es peor que la azulgrana y la merengue.
¿Se le puede exigir al Villarreal entrar en Champions?
Mi respuesta es que sí por varios motivos. El primero es que la temporada pasada alcanzaron las semifinales de la Champions League y el objetivo debe ser ahora trasladar ese gran rendimiento a LaLiga. El Villarreal debe ser regular. Esta temporada jugará la Conference League, que tiene mucha menos exigencia que la Champions, por lo que no puede fallar tanto, especialmente ante los rivales teóricamente inferiores que tanto se le atragantaron. Además, mantiene el bloque de la pasada temporada, este verano ha fichado a Morales y puede recuperar a Lo Celso. Por último, hay que mirar también a los rivales. El Atlético no parece que vaya a caerse de ese top-4, pero sí podría hacerlo el Sevilla. Los hispalenses han perdido a dos de sus piezas más importantes: Diego Carlos y Koundé. Y aunque la temporada pasada se consiguiera el objetivo de entrar en Champions, tampoco invitan al optimismo las sensaciones que hubo durante la mayor parte del curso.
¿Volverán a repetirse los 7 primeros equipos clasificados?
En las últimas dos temporadas se ha repetido el top-7 de LaLiga: Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid, Sevilla, Real Betis, Real Sociedad y Villarreal. Valencia y sobre todo Athletic Club parecen los más preparados para asaltarlo. El Valencia se ha debilitado un verano más y el último en salir ha sido ni menos que Guedes, su mejor jugador la pasada temporada. Viendo además los problemas económicos e institucionales que siguen habiendo en el club, parece complicado que los chés se cuelen en ese top-7. La situación del Athletic Club es distinta. La pasada campaña estuvo cerca de meterse en Europa y prácticamente no ha habido cambios en la plantilla, por lo que se espera un salto a partir de los jóvenes que ya han despuntado, como Sancet o Nico Williams, y que jugadores como Muniain o Íñigo Martínez sigan liderando. Pero, por encima de todo, se espera que Valverde saque tanto rendimiento a la plantilla como lo hizo en su anterior etapa. Mi sensación, sin embargo, es que sigue habiendo una diferencia importante entre el top-7 mencionado y el resto de equipos, por lo que mi pronóstico es que se va a mantener.
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