El Real Betis firmó una de sus actuaciones más completas de la temporada imponiéndose con claridad al Girona (1-3) en Montilivi, en un partido que los verdiblancos dejaron prácticamente sentenciado en una primera parte arrolladora. Los de Pellegrini, con la Champions en el horizonte, demostraron solidez, pegada y un fútbol coral ante un Girona que acumula ya diez partidos sin ganar y se asoma peligrosamente al descenso.
Primera parte: exhibición bética
El Betis salió decidido y, a los seis minutos, ya mandaba en el marcador. Isco botó un córner desde la derecha y Johnny Cardoso, desmarcándose con inteligencia, cabeceó picado al fondo de la red para el 0-1. El Girona, tocado, apenas inquietó salvo por un disparo de Asprilla que obligó a Adrián a lucirse tras una pérdida de Isco (min. 28).
Los verdiblancos detectaron las grietas defensivas de un Girona desbordado y, en el 38’, Perraud sirvió un centro perfecto que Antony empalmó de primeras para firmar un golazo y el 0-2. Solo tres minutos después, una jugada elaborada acabó con un remate de Abde, Gazzaniga repelió y el rechace lo cabeceó Isco para el 0-3 (min. 41), desatando la pitada de la grada local. El malagueño celebró de esto modo sus 33 años a lo grande: gol y asistencia.
Segunda parte: control y sentencia
La segunda mitad fue mucho más plácida para el Betis, que supo dormir el partido y dosificar esfuerzos. Pellegrini movió el banquillo y dio descanso a sus figuras, mientras el Girona, sin pólvora, solo pudo maquillar el resultado en el 86’ cuando Stuani cazó un balón suelto en el área tras un córner para el 1-3 definitivo.
Pese a algunos intentos de Portu y Stuani, el Betis gestionó con oficio la ventaja y pudo incluso ampliar la cuenta en alguna contra, como la que desperdició Antony en el 61’.
