El Manchester City logró poner fin a una preocupante racha de resultados negativos al vencer al Leicester City por 2-0 en su último partido del 2024. Este triunfo llega como un respiro para el equipo de Pep Guardiola, que atravesaba su peor crisis desde la llegada del técnico catalán al banquillo de Manchester.
Los ‘Citizens’ llegaban a este encuentro con un balance alarmante: una sola victoria en sus últimos trece partidos y cinco jornadas consecutivas sin ganar como visitantes. La presión sobre el equipo y su entrenador era evidente, con dudas crecientes sobre su capacidad para mantener el alto nivel de juego que los ha caracterizado en temporadas anteriores.
El partido número 500 de Guardiola al frente del City, a pesar de no ser un gran despliegue del fútbol brillante al que nos tiene acostumbrados, fue un alivio para el técnico. Dos acciones de Savinho permitieron asegurar los tres puntos. El brasileño anotó su primer gol en el 21′ y asistió a Haaland para el segundo, en una de las pocas ocasiones en que el noruego ha podido marcar en los últimos encuentros.
A pesar de la victoria, las dudas persisten y el City deberá reafirmarse en sus próximas citas del calendario. Sigue echando de menos a Rodri y buscando la manera de reencontrarse con su mejor versión. Guardiola, consciente de la situación, ha reafirmado su compromiso con el equipo: «No abandonaré. Quiero estar aquí y, en nuestra situación, debemos hacerlo». El técnico de Santpedor confía en que podrán superar este bache.
Con esta victoria, el Manchester City cierra el 2024 en quinta posición, a una distancia considerable del líder. El reto ahora será mantener esta línea ascendente y recuperar el terreno perdido en la Premier League, mientras intentan aparcar definitivamente la crisis que ha ensombrecido el final de su año.