Inaudito. Este equipo de cirujanos se encontraban realizando una operación a una paciente anestesiado en Hospital Clínico de la Universidad de Chile mientras veían la tanda de penaltis que enfrentaba a Chile y Portugal en las semifinales de la Copa Confederaciones. En el vídeo se puede ver la celebración en la sala cuando Claudio Bravo consigue detener uno de los lanzamientos.
Esto ha provocado severos cuestionamientos éticos, obliando al propio centro médico a emitir una declaración en la cual expresa un «categórico rechazo a que durante una intervención quirúrgica se haya mantenido un televisor encendido y que se haya grabado y difundido esta operación».
«Ambas situaciones son completamente aisladas y no son la práctica habitual de nuestro personal. Esto trasgrede el principio fundamental de respeto al paciente y la solemnidad propia de los actos quirúrgicos programados«, añadió.
El hospital anunció una investigación sumaria comprometiendo que se tomarán las medidas administrativas correspondientes y precisa que el paciente del video «ha evolucionado satisfactoriamente en su período postoperatorio».
«Es un viral que no tiene trasfondo, por lo tanto estamos investigando. Hemos solicitado conocer más detalles al respecto para tomar las medidas que correspondan», afirmó la ministra de salud Carmen Castillo al diario «El Mercurio». La diputada independiente Karla Rubilar, integrante de la Comisión de Salud de la Cámara Baja, condenó el hecho «a través de su cuenta en Twitter».
«Hay una ley de derechos y deberes de los pacientes que se vulneró. Hay límites en la vida, hay que saber dimensionar la gravedad de esto», aseveró.
Chile jugará el domingo la final de la Copa Confederaciones ante Alemania tras derrotar el miércoles a Portugal en una tanda de penales en la que Bravo fue el héroe al tapar los tres disparos lusos.
