Enrique JULIÁN GÓMEZ – Paseo triunfal para Nairo Quintana en la última etapa del Giro d'Italia. Ataviado con su equipación completamente rosa y bicicleta especial a juego, el colombiano de expresión imperturbable cruzaba por última vez la línea de meta feliz, junto a su compañero y gregario Fran Ventoso, con la sonrisa del deber cumplido. Pese a su juventud, era el favorito en todas las apuestas en la ya lejana salida hace tres semanas de Belfast, y no falló, para proclamarse primer campeón colombiano de la gran carrera italiana.
Un triunfo forjado en el caótico día del Stelvio y su gran ascensión final a Val Martello, asegurado en la cronoescalada al Monte Grappa y confirmado en la última etapa de montaña en el Zoncolan. Antes, bastantes dudas, pasando la primera mitad de la carrera escondido, aquejado por una infección respiratoria. Dudas disipadas en una última semana en la que tampoco necesitó mostrarse en exceso, más allá de Val Martello, para defender el rosa. Nairo, que ya fue segundo en su primer Tour, vence en el Giro de su debut, al igual que hicieron antes Alberto Contador, Miguel Indurain o Bernard Hinault. Y un futuro que, parece, será más esplendoroso que su presente
En el podio le acompañaron su compatriota Rigoberto Urán, que repite el segundo puesto del año pasado para completar un doblete histórico para Colombia, y el nuevo ídolo local Fabio Aru. El combativo Pierre Rolland se queda cuarto final, por delante de Domenico Pozzovivo. Otro colombiano, Julián Arredondo, subió al podio como mejor escalador, por delante de Dario Cataldo, y Nacer Bouhanni confirmó su maglia rossa como mejor velocista en la clasificación por puntos. Lógicamente, Nairo Quintana también vistió, al igual que el Tour, la maglia bianca como mejor joven de la carrera. El mejor español fue José Herrada, uno de los gregarios principales de Quintana, vigesimotercero.
En la última etapa, en un circuito en la fronteriza ciudad de Trieste, fue el esloveno Luka Mezgec, a apenas una decena de kilómetros de su país, quien se impuso en el sprint final. Tras la retirada de Marcel Kittel, que venció las dos primeras etapas, la inagotable cantera de sprinters del Giant presentaba a Mezgec, que ya ganó tres en Catalunya, y tampoco falló. A golpe de hombro se hizo hueco en la volata final para imponerse sobre Giacomo Nizzolo -cuatro segundos puestos en este Giro- y Tyler Farrar, con Bouhanni cuarto.
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