España encajó el primer gol en lo que llevamos de Eurocopa en propia puerta. No se flageló, se quitó la culpa y no se atemorizó ante la dimensión de la ilusión y la resistencia de Georgia. La acabó haciendo añicos y la debutante, consciente del hueso que tenía en frente, recogió sus bártulos y volvió a casa. España ya está en cuartos y ha llegado, sin duda, ofreciendo una de las mejores versiones del juego que se ha ofrecido en este torneo. Ayer le tocó remontar y también supo encontrar el equilibrio con el viento en contra. Rodri tomó la base y el timón y puso a los niños a salvo en su regazo. Allí estaba la calma. El faro, la luz en la oscuridad. El mediocentro decisivo; ‘follow the leader’.
España sacó de nuevo sus pasos prohibidos. Dos flechas lanzadas en cada banda, que juegan con una marcha más. Nacidos el 12 y 13 de julio, llevan una estrella en el pecho que se gestó cuando tan solo tenían 7 y 3 años. La lucen, la defienden y sueñan en crear una constelación. Nico Williams y Lamine Yamal, con su talento y su descaro, están definiendo a esta España. Poseen una verticalidad arrolladora para generar ocasiones; con velocidad y desborde reparten caramelos en la puerta de cada escuela. La joven dupla está liderando el ataque español y ha desatascado esa faceta en la que la selección dominaba los partidos pero le faltaba provocar más miedo. Con estos extremos, el peligro es constante y letal. A ver quién se cruza con ellos y logra dormir por las noches.
La naturalidad de Nico Williams, que ya atisba cierta madurez para no precipitarse al decidir, intimida. Lamine Yamal, con 16 años y una zurda prodigiosa, goza de una singular creatividad que expande en el terreno de juego. Ya en cuartos, los jóvenes extremos de España solo querían pasarlo bien y se jugaron al piedra, papel y tijera quién bebía primero de la botella mientras Rodri recogía su MVP. Los niños se divierten y la redonda sonríe. Este grupo va a afrontar un partido que podría tratarse de una final, ante la anfitriona. Probablemente, y solo con el permiso de Suiza, las selecciones que mejor han rendido en esta Eurocopa. Este grupo cree en lo que hace, se equilibra y se alimenta. Ya no hay que decirlo en voz baja; Alemania no lo va a tener nada fácil.
