El Real Betis está de moda y no solo por su gran labor en redes sociales, los memes y los chistes de Joaquín, sino que se sigue ganando en el campo el estar de moda. La temporada pasada terminaron en 5ª posición tras firmar una temporada histórica en la que se quedaron a tan solo 5 puntos de los puestos Champions. El destino quiso que ese 4º clasificado que quedó justo por encima fuese su rival natural, el Sevilla FC. Pero el Atleti (3º) no se quedó muy lejos, un punto por encima del Sevilla. Los verdiblancos vieron opciones reales de entrar en la Liga de Campeones y, aunque finalmente no se pudo, nadie pone en duda la grandiosa temporada que completaron los de Pellegrini.
En la temporada 22/23 parece que el objetivo sigue siendo el mismo: los puestos Champions. Al menos eso están tratando de demostrar con su arranque de curso en el que, tras 6 jornadas, son 3º en la tabla de clasificación, solamente por detrás de Madrid y Barça. Y aun así la diferencia es mínima, pues lo único que los separa del Real Madrid fue la victoria que se llevaron los blancos en su enfrentamiento directo. Todavía es muy pronto, por supuesto, pero esto va más allá de puntos, resultados y la tabla de clasificación, esto va de sensaciones.
El Betis está muy bien, eso es un hecho. Rui Silva está en buen momento, la defensa funciona bien, incluso con el recién incorporado Luiz Felipe integrado de maravilla, William Carvalho haciendo de las suyas, Canales y Fekir creo que no hace falta ni decir nada pues son dos genios, y Borja Iglesias está tan enchufado metiendo goles que hasta ha sido convocado para la Selección Española por primera vez a tan solo dos meses del Mundial. Todo funciona de maravilla. Vale, bien. Pues a ese fantástico estado de forma del Betis hay que sumarle el mal momento de sus dos principales competidores por una plaza entre los cuatro primeros: Atleti y Sevilla.
El Atlético de Madrid es un desastre defensivo que, por consecuencia, afecta a todas y cada una de las líneas. Os dejo un artículo de hace pocos días sobre el problemón que tiene Simeone con este tema. No está consiguiendo sumar como deberían, y actualmente son 7º, a 5 puntos del Betis -son muchos teniendo en cuenta que van 6 partidos-. Pero peor todavía es lo que les está tocando vivir a los sevillanos, los del bando contrario, por supuesto. El Sevilla FC no es que esté en un mal momento, es que está en un momento trágico, en una caminata por el desierto. Han sumado 5 puntos en los últimos 6 partidos, cifra que solo alcanza para el 15º puesto. Asusta decirlo así y es muy ventajista teniendo en cuenta lo temprano del calendario, pero el Sevilla FC está a 1 punto del descenso. La continuidad de Lopetegui está en duda, deberá usar este parón de selecciones para reflexionar y darle una vuelta a su equipo, de otra forma sus días parecen estar contados. Pese a todo, son equipos grandes, con un presupuesto y unos jugadores bastante superiores a la media de LaLiga, por lo que, a la larga, no me sorprendería para nada que escalasen posiciones y entren en una horquilla razonable. Si me preguntan a mí, creo que ambos terminarán entrando en Europa, pero no en Champions. Viendo como están las cosas, veo al Atleti capaz de llegar a puestos Champions -no sin sufrir-, pero mi porra es que este año el Sevilla no lo logrará y su sustituto será el Real Betis, su rival local.
Desde luego, es un Betis que ilusiona, que hace creer y que, ayudado por sus rivales en malos momentos, yo sí me lo creo. Yo me creo un Betis en Champions la temporada que viene. Y si no es a través de la liga doméstica, los veo capaces de ganar la Europa League, de perdidos al río. Quizá suena a un reto más difícil todavía, pero tras ver al Villarreal lograrlo y plantarse en semifinales de Champions League eliminando a la Juve y al Bayern, yo me creo cualquier cosa. Nunca mejor dicho, pero hemos venido a jugar.
Imagen de cabecera: Real Betis
