Mes caótico en el Etihad. El Manchester City ha sembrado numerosas dudas en los últimos cuatro partidos los cuales no han sido positivos y han dado lugar a un aluvión de críticas y titubeos. Al que parecía un equipo invencible y sin estrías, se le han empezado a ver sus debilidades e imperfecciones.
Dos empates, contra Celtic y Everton, y dos derrotas, ante Tottenham y FC Barcelona, en los cuatro últimos encuentros han formado una atmósfera de crispación e indecisión sobre el conjunto de Manchester. Sobre todo tras la goleada encajada ante los blaugranas el pasado miércoles. Guardiola, por la suplencia de Agüero y su mal planteamiento, y Bravo, por su error en el segundo gol que le provocó la expulsión, fueron el objetivo de todos los reproches. La prensa inglesa se cebó con ambos tras el choque. ‘Clownio’ tituló el diario ‘The Sun’ al día siguiente en un juego de palabras tachando de ‘payaso’ al chileno y el ‘Daily Mail’ definió la estrategia del técnico español como ‘valiente pero estúpida’.
Más allá del desastre en el Camp Nou, los ‘sky blues’ están demostrando cierta relajación e ineficacia en defensa encajando once goles en los últimos seis enfrentamientos. Problema importante, ya que el día que la pelota no quiera entrar en la portería tantas veces como se requiera y falle la puntería más de la cuenta, como frente a los ‘Toffees’ o a los escoceses, acabarán acusando esa problemática de nuevo. Otro dilema es la espesa e ineficiente salida de balón. Ante el Tottenham y el FC Barcelona se vio claro. Presionaron al City en su área prácticamente ahogándolo y obligándolo a jugar al patadón durante todo el partido. La ausencia de un delantero referente y corpulento para bajar algún que otro balón hace que el equipo contrario recupere rápidamente el esférico y los ‘citizens’ no puedan desarrollar su fútbol de pases y creación.
Detalles vitales y notables de los que seguro se habrá dado cuenta ya Guardiola que tratará de solventarlos y de seguir madurando su filosofía en el Manchester City que tendrá la oportunidad de redimirse y dispar las dudas este domingo ante su afición en el partido ante el Southampton.
