Esteban GÓMEZ – "¿Ve usted aquel cartel verde sobre la puerta que pone Salida? Es por ahí". En ocasiones, se deben dejar etapar atrás, se deben cerrar aventuras, no siempre de buen agrado, pero que a largo plazo, quizás, todo resultado positivo no sería posible sin ese mal trago.
En el mundo del fútbol las operaciones de mercado son elementos básicos. Idas y venidas, traspasos, cesiones, fichajes al fin y al cabo. Todo con ese molesto quebradero de cabeza de hacer maletas, para darle un cierto tono molesto. Existen situaciones en las que jugadores adquieren un mayor grado de carne de cañón, involucrados en operaciones entre clubes en las que tan sólo deben aceptar, o poner la menor resistencia posible.
En el glorioso, dorado, brillante, y todo término equivalente a poderío, Barcelona de Pep Guardiola existen éxitos, victorias de todo tipo, pero también aparece una fuga en su día ensombrecida, casi sin importancia, que hoy en día se traduce en algo más que una salida. La marcha de Yaya Touré del conjunto barcelonista, a día de hoy, quizás no se haya traducido en nada negativo para el equipo catalán. La figura de un joven Busquets se erigía en el centro del campo, provocando que el centrocampista africano tuviese que buscarse un hueco en otro lugar.
El Etihad Stadium tosía a propósito queriendo llamar su atención, incluso guiñaba descaradamente el ojo a un Touré que lo tuvo claro. El coqueteo fue inmediato, y el jugador se convertiría en verano de 2010 en nuevo futbolista del Manchester City. Los Citizens fichaban a un todoterreno, pero 4 años después aquel traspaso cifrado en 30 millones de euros se ha convertido en una operación magnífica para los de Manchester.
Yaya Toure actualmente es uno de los mejores futbolistas del mundo, sin lugar a dudas, y su relevancia en la Premier League, con su equipo, y en el fútbol africano (suma tres galardones de mejor jugador del continente las tres últimas temporadas) crece año tras año. Su importancia ya no recae en la presencia imponente sobre el centro del campo, sino que su progresión destaca características explotadas en las últimas temporadas, y que le convierten en un jugador imparable.
Su físico le permite dominar grandes parcelas del terreno de juego, tanto siendo el nexo junto a Fernandinho entre defensa y ataque como de coger el balón en campo propio (bajo la melodía de cornetas), arrancar, deshacerse de rivales a su paso y llegar hasta el área rival. Un jugador en estado de gracia.
Wembley acogía la Final de la Capital One Cup entre Manchester City y Sunderland, en un choque que presentaba a los pupilos de Manuel Pellegrini como los grandes favoritos. Sí, favoritos, pero no faltos de intriga. El tempranero gol de Borini (que duró hasta el descanso) hizo soñar a los Gustavo Poyet y sus Black Cats, pero el poderío de los de Manchester acabaría sentenciado la cita.
Todo comenzó precisamente con un gol de Yaya Toure. Como si no quisiera la cosa, como si no fuera con él, desde la frontal, desde fuera del área, casi sin espacio, con un movimiento rígido, casi antiestético, Toure marcaba el empate. Lo volvía a hacer una vez más esta temporada, sumando entre todas las competiciones 17 goles, que para tratarse de un mediocentro, no son cifras para dejar olvidadas en cualquier rincón cogiendo polvo. Minutos después, con un Sunderland noqueado, llegaría el 2-1 de Nasri, y ya casi sobre la bocina una contra sentenciaría con el gol de Jesús Navas.
El jugador africano está firmando su mejor temporada. Consagrado ya como uno de los mejores del mundo, está siendo una de las piezas claves de Manuel Pellegrini en la campaña. Frente al Sunderland, dio el primer paso hacia la remontada, con un golazo digno de una estrella mediática como es él, casi como si no fuera con él el tema.
Un futbolista que debe marcar la diferencia a partir de ahora, todavía más. Tras conseguir el primer título de la temporada, deberá aportar su granito de arena en Premier League (donde tienen dos partidos menos) y en FA Cup. Al margen de ambos torneos, la Champions League, donde deberán hacer un partido más que notable en el Camp Nou para lograr el pase, pero pese a ello, deben disputar la cita.
You must be logged in to post a comment Login