El defensa Rafael Márquez, figura clave en la selección mexicana de fútbol, será evaluado en Houston para determinar el alcance de una lesión lumbar que, según publica hoy el diario «Reforma», es más grave de lo que se pensaba.
«Se hizo un estudio el martes por la noche y se le detectó un daño en la quinta vértebra lumbar de la columna. Es algo serio y viajará para consultar a un especialista», dijo una fuente del club Atlas al diario.
El técnico del equipo, José Guadalupe Cruz, había adelantado el miércoles que Márquez, de 38 años, viajaría hoy a Houston para hacerse estudios, sin dar detalles.
Cruz confió, sin embargo, en que no sea necesaria una intervención quirúrgica que lo alejaría varios meses de las canchas. Hasta ahora su diagnóstico oficial es de lumbalgia.
Según «Reforma», por sus recurrentes problemas Márquez necesariamente tendrá que operarse en algún momento, pero el jugador quiere aplazar el quirófano hasta el final de su carrera, probablemente después del Mundial de Rusia 2018.
Márquez se lesionó en el partido del viernes ante Costa Rica en Ciudad de México por las eliminatorias mundialistas y regresó a Guadalajara para tratarse. Ya no jugó el siguiente partido ante Trinidad y Tobago.
El martes no podía sentarse ni estar de pie por mucho tiempo por los dolores y una resonancia magnética reveló que el daño era grave, indicó el diario. El veterano capitán de la selección mexicana, que aspira a jugar su quinto Mundial, es fundamental como líder dentro y fuera de la cancha tanto para Atlas como para la selección dirigida por el colombiano Juan Carlos Osorio.
«Es una influencia muy positiva, muy importante para todos en el plantel», dijo Cruz, que espera que sus molestias se puedan resolver con tratamientos y esté de regreso en la cancha en una o dos semanas.
México encabeza el hexagonal de la Confederación Norte, Centroamericana y del Caribe de Fútbol (Concacaf), con diez puntos.