Después de tres semanas de intensa competición, la fase de grupos del Mundial de Rugby ha llegado a su fin. La mayoría de los pronósticos se cumplieron, aunque varias sorpresas llegaron de parte de los más modestos y, sobre todo, de la anfitriona. Así quedaron los grupos.
Inglaterra, encuadrada en el grupo de la muerte con Australia y Gales, cayó prontamente eliminada en el icónico estadio de Twickenham, convirtiéndose en el primer equipo anfitrión que se queda fuera de la fase eliminatoria. Las derrotas contra Gales, en el último minuto, y posteriormente contra Australia sellaron su eliminación. Fiyi y Uruguay, la peor selección del torneo con 226 puntos en contra y solo 30 a favor -con dos ensayos- en su retorno al Mundial, cerraron el grupo.
El partido más sorprendente del torneo sirvió para abrir el grupo B: la selección de Japón consiguió una histórica victoria contra Sudáfrica, gracias a un ensayo en el último minuto. Posteriormente la lógica se impuso y, con Sudáfrica en primer lugar y Escocia en segunda gracias a los puntos de bonus, se clasificaron para cuartos de final. Japón, tercera finalmente, confirmó el puesto que ya tenía asegurado en el Mundial que albergará en 2019. Samoa y Estados Unidos completaron el grupo en las últimas posiciones.
La selección de Nueva Zelanda es la gran favorita a revalidar a título de campeón del mundo y apenas han pasado complicaciones en la fase de grupos. Solo Argentina en el debut les puso en apuros durante una hora, antes de claudicar. Atentos a los Pumas, que vienen en crecimiento en los últimos tiempos y avasallaron a los otros rivales del grupo para quedar en segunda posición. Meritorio tercer puesto de Georgia, clasificada de este modo para el próximo Mundial 2019, por delante de Tonga y Namibia.
Finalmente, Irlanda, vigente campeona del Seis Naciones, venció a Francia en el último encuentro del grupo D del Mundial, asegurándose el primer puesto ante una selección gala que ha ofrecido una imagen algo titubeante. Italia confirmó su clasificación para el próximo Mundial al finalizar tercero tras vencer a Rumanía y Canadá cerró el grupo sin triunfos.
El próximo fin de semana comienza la fase decisiva del Mundial con las eliminatorias directas: el sábado Sudáfrica se enfrentará a la selección de Gales: los africanos son favoritos, aunque los galeses llegan en plena forma tras sus buenas actuaciones en la fase de grupos y en la derrota ante Australia. Posteriormente, Nueva Zelanda se enfrentará a Francia, reedición de la última final: los franceses tendrán difícil replicar el gran triunfo en esta misma fase en 2007.
El domingo, la selección de Argentina se enfrentará a Irlanda, buscando su segunda clasificación en la historia a semifinales en un encuentro de difícil pronóstico; y finalmente Australia jugará contra Escocia, en la que parece la eliminatoria más desequilibrada de este Mundial.