Japón es un viejo conocido. Contra el conjunto nipón España ganó la final del último Mundial Sub-20 celebrado en Costa Rica. Entonces, la Rojita se impuso por 3-1 y logró su primer Mundial en la categoría, privando a las japonesas de revalidar su título en la búsqueda de una segunda corona consecutiva. Esta madrugada se intercambiaron los papeles, y el conjunto dirigido por Michihisa Kano tomó la revancha y apeó a las españolas del trono y de su sueño por volver a alzar el título.
Sonia Bermúdez apostó por el mismo once de gala que enfrentó ante Canadá en los octavos de final y que supuso el avance en la eliminatoria. El combinado japonés arrancó atrevido y, con toda la intención de hacerse con el balón a través de su característico orden. España, sin embargo, no puedo crear peligro alguno hasta rozar el descanso. Se marcharon al vestuario con un empate a cero, a pesar de los intentos de las niponas. La seleccionadora movió el banquillo para agitar la coctelera, pero no cambió la tendencia de España; que sencillamente seguía resistiendo los ataques de las japonesas. No fue hasta el segundo acto que la Rojita la tuvo para creer, cuando un disparo de Lucía Corrales se estrelló al palo. No fue suficiente para crear un punto de inflexión que reactivara el partido a favor de las españolas. Japón siguió haciendo lo suyo.
El encuentro, por falta de eficacia, derivó en la prórroga, donde a España, a pesar de mostrar algunos síntomas de mejoría, le tocó vivir la parte más dolorosa. La defensa Hiromi Yoneda, en el 103’, hizo el tanto (1-0) que valdría el pase a las semifinales para Japón. España lo intentó hasta el final, pero nada fue suficiente para no caer en los cuartos de final y dijo adiós al Mundial de Colombia. Las asiáticas seguirán su lucha ante Países Bajos.
