Encontrar un hueco en la delantera del Real Madrid no es tarea fácil. La línea de ataque del equipo blanco es una de las más codiciadas, aquella posición que reúne a los fichajes más millonarios por los que apuesta el equipo cada temporada. Una situación que deja pocas oportunidades a esas promesas que, con entusiasmo e ilusión, desean subir al primer equipo y compartir vestuario con jugadores de la talla de Cristiano Ronaldo, James Rodríguez, Karim Benzema o Sergio Ramos, entre otros.
El Real Madrid destaca por ser uno de los equipos que mejor capta el talento de sus delanteros. Sus canteranos suelen tener un olfato goleador espléndido, pero salvo casos excepcionales como el de Raúl González, a éstos se les da poca oportunidad para triunfar con el primer equipo.
En esta línea, nos encontramos con casos como el de Adolfo Aldana, formado en las canteras juveniles del Real Madrid y que llegó a debutar con el equipo blanco ante el FC Barcelona. Su gran éxito con el segundo equipo, pronto se vio frustrado, pues Míchel acaparaba por aquel entonces el carril derecho del conjunto merengue. Demostró tener un gran nivel, pero el banquillo se convirtió en rutina, hasta que la llegada de Luis Enrique mermó cualquier tipo de esperanza que albergara en el interior de Adolfo Aldana por triunfar con el Real Madrid en Primera División.
Otro caso fue el de Dani García Lara. Formado en la cantera del Real Madrid, pero sin hueco en la delantera del primer equipo, se marchó al Real Zaragoza para años después ser repescado de nuevo por el conjunto blanco. Pero las oportunidades siguieron siendo escasas, hasta que fue fichado por el FC Barcelona en el año de su centenario. Se ganó la confianza de Louis Van Gaal y logró anotar un total de 11 goles en 27 partidos disputados. Destacó por ser un goleador nato tanto en Liga, como en Copa del Rey y Champions League.
Más recientemente, también se han vivido situaciones similares con varios delanteros canteranos del Real Madrid. Para Morata, Callejón, Soldado o Negredo ha sido tarea imposible encontrar un hueco en el ataque de Chamartín, hecho que les ha obligado a decir adiós al equipo de su vida para probar fortuna fuera de las fronteras españolas.
Tan sólo falta ver lo que pasa con Jesé. Recién recuperado de su larga lesión, parece que el canario ha vuelto a mostrar su mejor versión. Al menos fue esa sensación la que dejó el día de su reaparición con la elástica blanca en Copa del Rey. Jesé tiene la misión de esquivar la maldición que parece acechar a todos los delanteros formados en la cantera madridista. Olfato e instinto no le faltan al joven delantero, pero ¿tendrá hueco en la delantera millonaria que monopolizan Cristiano, Benzema y Bale?