Quedan escasas horas para que comience la finalísima, el partido más significativo de la temporada a nivel de clubes: la final de la UEFA Champions League. Un todo o nada entre Real Madrid y Liverpool que terminará con la gloria de uno de los bandos. En este caso, reflexionaremos sobre qué supone para el Liverpool ganar la Champions, que es mucho.
Desempate y revancha
En la temporada 1980/81, la final de la por entonces Copa de Europa fue idéntica a la de este año: Real Madrid contra Liverpool. Fue el equipo inglés el que se llevó la victoria con un solitario gol de Alan Kennedy en el minuto 82. Aquel año, el Liverpool se proclamó campeón invicto y sin extranjeros, pues todos eran ingleses. Muchos años después, la final se repitió. Una final que todos recordaremos ya que hace escasos cuatro años y en la que el Real Madrid logró levantar su 13ª Liga de Campeones. También se recuerda por un episodio entre Sergio Ramos y Mo Salah que terminó con el egipcio lesionado de un hombro y fuera de la final. Aquel partido terminó 3-1 para los merengues, por lo que el contador de finales de Champions se encuentra 1-1. En palabras de Salah, y aunque su entrenador no está de acuerdo, esta nueva final puede suponer una revancha por la sufrida hace cuatro años, además seguro que el egipcio tiene todavía el recuerdo de la llave de judo que le hizo Ramos, por lo que su sed de venganza será todavía mayor.
La Premier, la mejor liga del mundo
Una hipotética victoria del Liverpool sería otra reafirmación de este subtítulo. El subcampeón de Inglaterra venciendo en el torneo más importante a nivel de clubes al campeón español, y campeón con cierta facilidad en la liga doméstica. La Premier es una liga que mueve unas cantidades de dinero muy superiores a LaLiga, lo que hace que, en un cambio progresivo que lleva años sucediendo, la liga española haya dejado de ser la mejor tras perder la generación dorada que nos hizo vibrar los último 15 años. Dudo que en Inglaterra todo el mundo esté de parte del Liverpool, pues en España tampoco todo el mundo está con el Madrid, pero para el prestigio de su liga es muy importante ganar esta final.
Dos de las últimas cuatro
Ganar una Champions es extremadamente difícil, nada que no sepamos ya. Ganar dos, el doble de complicado. Pero ganar dos en cuatro años es mostrar una superioridad en este torneo bastante abrumadora, más todavía cuando el año anterior a esos 4 también estabas en la final. Y de eso sabe mucho el Real Madrid, que ganó cuatro en cinco años por lo que, para ganar, deben darle de su propia medicina.
La guinda de un año casi perfecto
El Liverpool va a disputar esta temporada el máximo de partidos que un equipo puede jugar en una temporada en Inglaterra. Ha llegado a las finales de todos los torneos que ha disputado o está disputando todavía, logrando coronarse campeón (por ahora) de la FA Cup y la Copa de la Liga. Todavía tiene pendiente la final de la Community Shield frente al Manchester City, además de la final de la Champions, por supuesto. Y en la Premier han terminado segundos, a un punto del líder, lo que se puede considerar prácticamente una victoria sin medalla. Un gran año de los de Klopp que se convertiría en excelente de ganar EL partido.
La 7ª para el Liverpool
Lograr ganar la Champions no solo sería un gran éxito para este equipo y esta plantilla, sino que sería un logro importantísimo a nivel de club. A día de hoy son el 3º equipo con más títulos de Liga de Campeones, empatados con el Bayern Múnich. De ganar la 7ª, igualarían al Milan como segundos máximos ganadores históricos de dicha competición, solo por detrás de las 13 del Real Madrid. De no ser así, la 14ª del Madrid haría todavía más difícil que alguien los alcance en los próximos años.
Imagen de cabecera: Liverpool FC