El Real Madrid ganó hoy 2-1 en el campo del Sporting de Lisboa gracias a un espléndido cabezazo de Karim Benzema a tres minutos de la conclusión que permitió a los blancos calsificarse para los octavos de final de la Liga de Campeones y poder pelear por el liderato en la última jornada.
El equipo blanco, muy cansado, sufrió mucho a pesar de llegar al descanso con ventaja por el gol de Raphael Varane. En la segunda mitad marcó Adrien Silva de penal y con cierta agonía Benzema propició una victoria del Real Madrid que permitira a los blancos luchar en casa por ser primero ante el Borussia Dortmund.
La primera parte fue muy pareja y el Real Madrid se fue con ventaja simplemente porque tuvo más eficacia que su rival. De nuevo, impuso la ley de su pegada, tan mortífera, aunque esta vez llevó la firma de un central.
Zidane volvió a apostar por el mismo dibujo y los mismos futbolistas que el sábado ganaron 3-0 en el campo del Atlético de Madrid, con la única novedad de la entrada de Sergio Ramos por Nacho Fernández en el centro de la zaga. De nuevo Isco jugó en la media punta, aunque sin tanta fortuna como entonces.
Varane celebra su gol en la noche de hoy | Getty
Cristiano Ronaldo regresó a la casa en la que se formó, pero apenas dejó sello en su vuelta a Lisboa. Firmó una actuación muy gris, sin impacto alguno en el juego.
El Sporting efectuó un derroche físico brutal al ejercer una incansable presión sobre la salida de balón de los blancos y el Real Madrid sufrió para mantener la posesión. Además, cometió pérdidas de pelota que no le causaron mayores problemas porque el conjunto portugués no tiene los delanteros que poseen los blancos.
El Real Madrid se adelantó a los 29 minutos en una jugada a balón parado en la que contó con la fortuna, pues el Sporting no acertó a despejar y la pelota quedó muerta para que Varane fusilara a la red. Cualquier error se paga caro ante el campeón de Europa.
Los minutos finales fueron para Gelson Martins, que volvió loco a Marcelo y sembró el pánico en la defensa blanca. Varane y Keylor Navas estuvieron lo suficientemente firmes para sostener la ventaja visitante al descanso.
El inicio de la segunda parte no tuvo dueño y el Real Madrid jugó con fuego durante mucho tiempo. El Sporting acumuló llegadas, pero no ocasiones, principalmente porque le falta calidad en vanguardia. Eso le salvó al campeón de Europa.
Adrien celebra su gol de penalti tras engañar a Keylor | Getty
El duelo pareció romperse a los 64 minutos, cuando el Sporting se quedó en inferioridad. Fue en una acción confusa, en la que Joao Pereira y Mateo Kovacic se enredaron. El árbitro entendió que hubo agresión del portugués y lo expulsó.
El Real Madrid entendió entonces qué tipo de partido le convenía y utilizó la posesión para defenderse. Además, presionó arriba para dificultar la salida de balón del Sporting, con más problemas al estar en inferioridad.
Al rescate del Sporting apareció Fabio Coentrao con un penal absurdo, casi cómico, al dar el balón con la mano en su área mientras protestaba una acción. Ocurrió a los 80 minutos y Adrien Silva marcó la pena máxima.
El Real Madrid tiró de orgullo y talento para resolver el duelo. Benzema, que entró a los 67 minutos, dispuso de su única ocasión y demostró su calidad con un precioso y difícil cabezazo que silenció el José Alvalade. El francés sacó al campeón de Europa de un problema, aunque deberá ganarle al Borussia Dortmund en la próxima jornada para terminar primero en el grupo.