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Bundesliga

La vida sin Kevin de Bruyne

El pasado 30 de agosto llegó la noticia de forma oficial a la ciudad de Wolfsburg: Kevin De Bruyne abandonaba el equipo rumbo a la Premier League inglesa. Muchos de los aficionados del conjunto del norte de Alemania se echaron las manos a la cabeza, ya que, a pesar de que el Wolfsburg tiene un gran plantilla, Kevin era la figura principal, el jugador que destacaba por encima del resto. Y encima en la temporada pasada se afianzó como una de las voces cantantes del vestuario, como un líder.

Si algunos aficionados pensaron que la salida de De Bruyne sería un cambio drástico para el equipo, el técnico Dieter Hecking comenzó a trabajar para que no fuera así. El puesto de «estrella del equipo» pasó, de alguna manera, al recién llegado Julian Draxler. Él es un jugador que sabe lo que es la presión, no le dará miedo llevar los galones del equipo. Hecking lo sabe y quiere darle cada vez más importancia en el equipo. El entrenador germano, hasta ahora, se puede decir que está gestionando la situación a las mil maravillas. La temporada pasada, una campaña de ensueño para el Wolfsburg, a estas alturas, el conjunto de ‘los lobos’ se encontraba en la 7ª posición de la tabla y, en la presente temporada se posiciona en el 4º puesto.

Los cimientos del Wolfsburg

El Wolfsburg sigue jugando un fútbol combinativo, con una defensa muy bien organizada y siempre al acecho de una contra perfecta que finalice en gol. Ese es el juego definido del Wolfsburg y estos son sus jugadores más importantes en esta temporada que comenzó hace un mes.

 

Naldo. El valuarte defensivo, el castillo de Wolfsbug. El central brasileño se consolidó la pasada campaña como uno de los mejores defensores de toda la Bundesliga. Su veteranía y su buen estado físico le ayudan para mantener el rendimiento. Es un defensa con buena salida de balón y que suma entres 3 y 4 goles por temporada.

Ricardo Rodríguez. Veloz, corpulento, con capacidad de intercepción, muy llegador y un lateral que se implica seriamente en su tarea defensiva. El suizo de madre española es uno de los laterales izquierdos del momento. Con sus subidas por la banda hace mucho daño a las defensas rivales. Un jugador muy versátil, imprescindible en el terreno de juego.

Guilavogui. Uno de los fijos de Hecking este inicio de temporada. El joven centrocampista defensivo sorprendió cuando comenzó a rendir en las filas del Wolfsburg tras su llegada del Atlético de Madrid, de donde no tendrá muchos recuerdos. El francés tiene la oportunidad esta temporada de ser uno de los jugadores más destacados, el que da forma al equipo.

Draxler. Llegó del Schalke siendo muy criticado, pero el joven jugador alemán no ha permitido que las críticas le afecten a su rendimiento. Desde el primer momento ha tratado de aportar al juego del Wolfsburg. Sabe que es un equipo en el que puede destacar por encima del resto y que le puede servir de trampolín para llegar a un equipo de la élite mundial. Para ello, debe tomar la brújula del equipo y llevarlo a lo más alto posible.

Kruse. Un jugador pedido por el técino alemán, por lo tanto, de su agrado. Ya ha sumado muchos minutos gracias a la confianza que el entrenador ha depositado en él y gracias a su función multiusos. Se desenvuelve a las mil maravillas por las dos bandas, en la segunda punta y como único punta de referencia. Por el monento no ha anotado ningún gol, pero es un jugador que aporta muchas cosas positivas al ataque del equipo.

Dost. Por último, el delantero goleador del Wolfsburg. No podía faltar el ‘killer’ de los Países Bajos. Este año llegó incluso a ser convocado con su combinado nacional. Es un delantero que siempre está a la caza del gol, y así es como se consiguen los goles. Por el momento lleva 5, veremos a ver hasta a cuántos es capaz de llegar esta temporada.

En definitiva, el Wolfsburg sigue teniendo un proyecto ambicioso a pesar de haber sufrido una pérdida este verano tan importante como ha sido la de Kevin De Bruyne. Con un ojo puesto en la Bundesliga y el otro en la Champions, el conjunto de Dieter Hecking buscará seguir siendo un equipo revelación; esta vez, también en la edición de Champions League.

Sevilla, 1996. Periodismo deportivo como vocación. Amante del fútbol matutino y de los entrenadores arriesgados.

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