324 días han tenido que pasar para que la Real Sociedad saliese victoriosa en un campo ajeno. Desde aquel 16 de abril del año pasado en el Heliópolis con gol de Vela de penalti, los txuri-urdines no han sido capaces de sumar 3 puntos en liga hasta hoy. Los de Moyes consiguieron una ansiada victoria fuera de casa con el apoyo de un centenar de aficionados donostiarras que se desplazaron a Getafe para animar a los suyos. Como dato, cabe añadir que el ex jugador txuri-urdin Asier Illarramendi vio el partido en directo desde las gradas del Coliseum.
El partido empezó como nos tiene acostumbrado la Real fuera de casa. Ritmo lento sin grandes ideas y con un juego muy plano que no creaba ninguna ocasión. Avisaba el Getafe con disparos de Álvaro, Sarabia y Diego Castro, pero todos los remates eran atajados por un muro llamado Gerónimo Rulli. El portero recién convocado por el Tata Martino para defender la albiceleste en los amistosos contra El Salvador y Ecuador a finales de marzo, fue el mejor jugador de la primera parte con grandes intervenciones salvando a su equipo. Una de ellas, fue primordial al filo del descanso con una doble parada. La primera con el pie, y la siguiente con la cabeza. Los aficionados del Coliseum Alfonso Pérez no daban crédito.
David Moyes debió gritar y mucho a sus jugadores en el vestuario porque la Real salió totalmente enfilada a por la victoria en la segunda mitad. La banda izquierda fue el arma principal para los donostiarras con buenas internadas de Chory y Canales que cuajó un gran partido. Ya en el ecuador de la segunda mitad llegó el gol txuri-urdin. Si la semana pasada fue Kiko Casilla el que colaboró con el gol, hoy fue el pobre Guaita que solo pudo recoger el balón del fondo de las mallas. Una perfecta falta lanzada por el ‘pirata’ Granero fue rematada de manera magistral por Iñigo Martínez, (con la mala fortuna para los azulones) el balón pegó en el palo para posteriormente golpear en guardameta valenciano e introducirse mansamente dentro de la red. Con este gol, ‘Iñi’ se ha convertido en el 4º defensa máximo goleador en Liga para la Real Sociedad con 12 tantos en su casillero.
Desde el banquillo realista se leyó muy bien el partido y el escocés dio entrada a Markel para destruir el juego madrileño y al eléctrico Pablo Hervías que sustituyó a un cansado Chory Castro. Yoda también entró en los últimos minutos para intentar la gesta del partido de Anoeta (remontar el partido de 1-0 en el minuto 86 al 1-2 final), pero casi no intervino en el juego y los puntos volaron a tierras donostiarras. Los resultados parecen que van llegando aunque sin un gran fútbol que maravilla al mundo, pero como diría Sr David Moyes: “That’s correct”.
Con esta victoria la Real se coloca décima y ya mira más hacía arriba que hacía abajo. La próxima semana tiene una perfecta oportunidad ante su público para conseguir la tercera victoria consecutiva ante el colista de Primera División y de momento sin entrenador, el Córdoba.
