El Tottenham estrenó con regularidad Wembley la temporada pasada en Champions League y el resultado fue visiblemente negativo. El equipo quedó eliminado de la fase de grupos de la máxima competición europea. Este año, con White Hart Lane derribado y viviendo de alquiler en el lujoso Wembley, el año no ha podido empezar peor con una derrota ante el Chelsea por un tanto a dos.
Cabe recordar que el Chelsea apartó de la final de la FA Cup al Tottenham la temporada pasada, ¿adivinan donde? sí, en Wembley. Un doblete de Willian fue igualado por Kane y Alli, las estrellas de los Spurs que vieron como en los compases finales Diego Costa y Hazard daban el triunfo final al conjunto ‘blue‘ dejando a las puertas de la final al Tottenham.
LEER MÁS: Troy Deeney, de la cárcel a ser estrella de la Premier League con el Watford
Antes pasamos de puntillas sobre la actuación de los Spurs en la Champions League de la temporada pasada, competición a la que volverán en la presente edición. A priori, antes de comenzar, Mónaco, Leverkusen y CSKA de Moscú no parecían suponer un escollo de dificultad elevada para pasar a la ronda del KO, pero esto es fútbol, y el nombre no te hace ganar los partidos.
El Mónaco fue el estreno de la competición para el Tottenham en Wembley, quien no pudo empezar de peor manera que con una derrota en su feudo (1-2). Recuperó crédito con su victoria por la mínima en Moscú y el empate sin goles en Leverkusen, lo que le dejaba en una situación favorable para rematar la clasificación en Wembley, pero el aura del estadio (y el mal juego), propiciaron una nueva derrota por la mínima ante el Bayer Leverkusen en Londres. La derrota en Mónaco dejaba sin opciones a los de Pochettino que acabaron su participación en la Champions League con una estéril victoria en Wembley ante el eliminado CSKA Moscú.
El tercer puesto del grupo de la Champions le dio la opción de disputar la Europa League, competición en la que cayó a las primeras de cambio ante el Gent belga. Una derrota por la mínima en Bélgica (1-0) no parecía ser una utopía para que el Tottenham pudiera remontar en casa ante el claramente inferior equipo belga. Pero, una vez más, Wembley hizo de las suyas y los Spurs no pasaron del empate a dos que dejaba al Tottenham sin competición europea.
De la maldición de Wembley, a la de Harry Kane. El gran delantero inglés y gran esperanza de la selección para meter goles, pasa por una maldición de cara a puerta. Esta vez, Wembley poco o nada tiene que ver, y es que el delantero inglés no sabe lo que es marcar un gol oficial en el mes de agosto. El efecto jet-lag, la baja forma o la suerte, podrán ser los motivos por los que un goleador de más de 30 goles por temporada tenga este sino durante el mes inaugural de las competiciones.
Una curiosa maldición que le acompaña en sus cuatro temporadas como profesional vistiendo la camiseta de los Spurs en los que en los 12 partidos disputados, y en los 34 tiros a puerta lanzados, nunca ha podido celebrar un gol, aun le queda una oportunidad el próximo fin de semana para acabar con una maldición casual y ayudar al Tottenham a no descolgarse en estos primeros compases de competición. El Burnley parece víctima propicia para acabar con la maldición del gol del mes de agosto.
You must be logged in to post a comment Login