Alemania deberá disputar dos partidos en el próximo parón, uno de clasificación para el Mundial de Rusia, frente a San Marino, y otro, un amistoso, frente a Italia. Para esta lista se unen a los habituales, tres jugadores que, hasta ahora, eran jugadores de la sub-21 y aún no habían ido con los mayores: Yannick Gerhardt (Wolfsburg), Serge Gnabry (Werder Bremen) y Benjamin Henrichs (Bayer 04 Leverkusen).
Para Serge Gnabry este año está siendo redondo. Llegó muy joven al Arsenal y ha contado en pocas ocasiones para el primer equipo de Wenger. Este verano retornó a la Bundesliga de la mano del Werder Bremen y se ha convertido en un hombre indispensable para la plantilla, con tan solo 21 años. Yannick Gerhardt, por su parte, fue también traspasado este verano, del FC Köln al Wolfsburg, tras sus buenos años con el club de Colonia. Aunque el equipo no haya tenido un buen rendimiento, Yannick se ha metido, de lleno, en la titularidad y va a costar sacarle de ahí. Henrichs, por su parte, fue entrando gradualmente a las convocatorias del Leverkusen hasta que, ya este año, ha ocupado el lateral derecho y se encuentra con poca oposición.
Si a todo eso se le suma la continuidad de gente como Kevin Volland, Max Meyer, Joshua Kimmich, Julian Weigl o Julian Brandt, entre otros, da la sensación de que ha invadido la Mannschaft una nueva generación de jugadores que, junto a Joachim Löw, será habitual hasta la Eurocopa 2020, si todo va bien. Por otra parte, Mario Gómez, que se perdió la última convocatoria por lesión, ha vuelto a ser convocado. La de Rusia será, con toda seguridad, la última gran cita para el alemán descendiente de españoles.
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