FIFPro, el sindicato internacional de futbolistas, ha dado a conocer en un detallado informe las conclusiones de su primera encuesta a nivel mundial sobre las condiciones laborales en el fútbol profesional masculino, con el objetivo de aumentar la concienciación sobre la realidad de los futbolistas, especialmente de aquellos que no forman parte de la élite.
Con la evaluación independiente y las respuestas de 14.000 futbolistas recabadas por parte de la Universidad de Mánchester para la zona europea, americana y africana, además del informe para Asia y Oceanía realizado por la Universidad de Malasia en 2015, se ha podido saber que el 45% de los futbolistas del mundo cobran menos de 940 euros al mes que, sumado a la habitual inestabilidad y corta duración de sus carreras en términos generales (una media de menos de dos años), desmonta la extendida creencia de que los profesionales del fútbol gozan de un estilo de vida lujoso y privilegiado. Una problemática que se sitúa en el 21% entre los que ganan menos de 278 euros al mes.
La macroencuesta realizada por FIFPro muestra, asimismo, que el salario medio de los futbolistas se sitúa entre esos 940 euros y los 1900 euros y que únicamente el 2% de ellos cobra un sueldo anual superior a 660.000 euros en términos netos. Entre las conclusiones también se pone el foco en el retraso de los pagos, siendo un 41% de los jugadores los que afirman no haber cobrado en tiempo en al menos una ocasión durante las dos últimas temporadas.
La encuesta ha revelado también que el 6% de los encuestados han recibido presiones para rescindir o renovar su contrato, siendo apartados del equipo y obligados a entrenar por separado, y que el 29% de los futbolistas que han sido traspasados había sido mediante presiones o bien, a un club al que no deseaban incorporarse. Además de ello, el 7% reportó que había tenido propuestas para amañar partidos a lo largo de su carrera -una cifra que asciende al 11% entre los futbolistas de más de treinta años- y el 7,5% afirma haber padecido discriminaciones por su religión, color de piel o condición sexual.