Síguenos de cerca

Celta

Éramos felices y no lo sabíamos: Aleksandr Mostovoi

𝑨𝒍𝒆𝒌𝒔𝒂𝒏𝒅𝒓 𝑴𝒐𝒔𝒕𝒐𝒗𝒐́𝒊, ‘El Zar’, (San Petersburgo, 1968). Espía ruso camuflado de futbolista excelso que tras formarse en el Spartak Moscú llevó a cabo misiones especiales por Lisboa, Caen y Estrasburgo antes de aterrizar en Vigo y rodar la que sin duda sería la película de su vida (1996-2004).

Su talento era directamente proporcional a su carácter. Un tipo de corazón caliente que se crió en el frío. Pies de seda, pasional, gen ganador y con la calidad siempre por delante. Mago de múltiples registros que acabó hechizando a Balaídos y a toda LaLiga.

Influyó a toda una generación en mayor o menor medida y eso supone más palmarés que los títulos, porque aunque no lo creas, el legado siempre será más importante que el número de copas levantadas. Los trofeos guardan polvo, los recuerdos alimentan el alma.

El ruso fue poesía en tiempos de prosa. En su chistera cabían sueños, su mente imaginaba jugadas prohibidas y con sus botas dibujaba lo imposible. Pura afouteza. Puro corazón.

Papá de Miranda. Orgulloso hijo de gallego y asturiana. Dejé 13 años como abogado por fundar y dirigir Sphera Sports, con lo que ello supone. Asumo las consecuencias. Hice 'mili' en Pisa y en Bristol. Me gustan las orcas, los países escandinavos y un gol en el 90'.

Comparte la notícia

No te lo pierdas

Más sobre Celta