Tras la llegada de Abramovich en 2003 el Chelsea ha crecido a pasos agigantados. Tal ha sido su crecimiento que actualmente se ha ganado ser considerado uno de los mejores. Para ello, la inversión ha sido gigantesca y la presión, extrema. En este sentido, ningún entrenador se ha mantenido más de tres temporadas al frente del conjunto blue.
Sin estabilidad. Esa es la idea con la que uno se queda cuando ve el balance de entrenadores que han pasado por Stamford Bridge desde julio de 2003. Conte será el décimo de un grupo de entrenadores top, de los cuales Mourinho y Hiddink repitieron experiencia. De los 10 nombres destaca la acumulación de italianos: en efecto, Conte será el cuarto tras Claudio Ranieri, Carlo Ancelotti y Roberto Di Matteo. A Abramovich le van los entrenadores italianos.
El entrenador del actual campeón de la Premier League no supo congeniar con el magnate ruso y tan solo una temporada después de la llegada de Abramovich, fue cesado. Y eso que había colocado al equipo entre los 4 mejores de la Liga de Campeones. El siguiente italiano fue Ancelotti, ex entrenador, entre otros, de Madrid y Bayern, que llegó en 2009 y logró un meritorio doblete en su primera campaña: Premier League y FA Cup. Una segunda temporada en blanco, pero, le condenó y su puesto fue relevado por André Villas-Boas. Finalmente, Roberto Di Matteo fue el último italiano en liderar a los blues y su paso por tierras londinenses jamás será olvidado: eliminó al Napolés (remontada incluida), Benfica, Barça y Bayern para alzarse con la primera Liga de Campeones de la historia del Chelsea. Como guinda del pastel le sumó una FA Cup. Un mal inicio en la siguiente temporada puso fin a su etapa como técnico blue y dio paso a Rafa Benítez.
La llegada de Conte ha impregnado de optimismo a la hinchada blue. Sus ascensos con el Bari y el Siena, y sus tres scudettos con la Juventus (no perdió ni un partido en su primera campaña: 23 victorias y 15 empates), sumado a su gran actuación al frente del combinado italiano en la Eurocopa 2016, le avalan. Conte garantiza entrega, competitividad, unión y verticalidad. Sabe lidiar, además, con jugadores veteranos, tal y como demostró con la ‘vecchia signora’ formando un equipo alrededor de Pirlo. En líneas generales, por ende, la suya parece una apuesta segura y necesaria, especialmente teniendo en cuenta lo reñida que va a estar la Premier la temporada que viene.