El tercer día de la EURO fue inaugurado por la victoria de Países Bajos, que supo revertir el resultado en contra que aconteció en el primer tramo del partido. Adam Buksa estrenó el marcador para Polonia, pero Gakpo replicó para volver a poner el encuentro en igualdad de condiciones. La selección polaca, que no contó con su gran figura Robert Lewandowski, mostró su resistencia, pero la Oranje de Koeman remontó. El seleccionador dio entrada a Weghorst en el 81’ y en apenas dos minutos ejecutó el gol que le dio la victoria a los holandeses (1-2) para empezar a encarar su clasificación.
Sin embargo, el domingo estaba marcado por su segundo encuentro, que contaba con un aliciente y motivo de celebración para cualquier aficionado al fútbol: Christian Eriksen volvía a la máxima competición continental tras sufrir un paro cardíaco en la pasada edición. Los daneses abrieron su cuenta de registro goleador con las botas del jugador del Manchester United. Por ello, el tanto de Dinamarca ante Eslovenia es y será el gol más especial del torneo. La alegría de la selección danesa solo se vio rebajada por el empate que logró Eslovenia (Erik Janza), firmando el resultado definitivo (1-1).
El último turno fue para una ansiada Inglaterra, que venció por la mínima ante Serbia gracias al tanto de Jude Bellingham. Más allá del gol, el combinado dirigido por Gareth Southgate no ofreció mucho más, dejando muchas dudas y un sabor muy distinto al esperado. Serbia lo peleó y casi le alcanzó en las estadísticas. En los últimos minutos, Pickford detuvo un disparo de Vlahovic que les hizo sentir contra las cuerdas. Los ‘Three Lions’ van a necesitar mucho más si quieren ser una certeza en esta Eurocopa.