Apareció de nuevo el fútbol del Manchester City, que goleó al Ipswich Town en Portman Road. Los de Kieran McKenna, que están en la zona peligrosa de la tabla, encajaron seis goles. La contundente victoria significó un respiro para el equipo dirigido por Pep Guardiola, que recuperó su plaza en zona de Champions.
El partido fue un auténtico recital del City, con Phil Foden como gran protagonista con un doblete. Mateo Kovacic, Jérémy Doku, Erling Haaland, James McAtee hicieron el resto. Los citizens desplegaron un fútbol demoledor, con Foden encontrando su mejor versión y liderando el ataque con precisión y efectividad.
Pep Guardiola destacó después del encuentro: «Volvimos a hacer las cosas que han caracterizado a este equipo durante la última década», dejando claro que el equipo mantiene su espíritu competitivo. La goleada no solo fue importante por los tres puntos, sino también por la manera en que se consiguió, mostrando el potencial ofensivo del Manchester City. Algo que podría ser un punto de inflexión para que la confianza vuelva a instalarse en el equipo.
Demostrar la continuidad de estas buenas sensaciones no será fácil para los de Pep, que afrontarán un calendario exigente y diabólico. Su próxima cita será en Champions, donde visitará al PSG. Después volverán a la competición doméstica para enfrentarse con el Chelsea en el Etihad y concluirán el mes de enero con un duelo ante el Brujas. Febrero aún será menos clemente, pues en Premier League se disputarán los puntos ante Arsenal, Newcastle, Liverpool, Tottenham y empezarán el mes de marzo visitando al Nottingham Forest. Casi nada.
