La 8ª jornada de la nueva temporada de Serie A dejó como siempre protagonistas, individuales y colectivos. Nombres propios que describen una jornada en la que la Juve ya suma pleno de ocho triunfos, ninguno de los grandes se fue sin triunfo y Frosinone y Chievo continúan hundidos en la tabla. Cielo, purgatorio o infierno, allí llega el alma de los protagonistas de esta semana en la Divina Comedia del Calcio. Una jornada vista por Dante.
CIELO
Mauro Icardi. Tres goles y una asistencia en los dos últimos partidos que ha disputado demuestran que la mejor versión del Inter, al menos en resultados, aparece siempre cuando el olfato de Icardi está afinado. El oportunismo del argentino ahuyentó los aprietos en los que la SPAL puso a los nerazzurri para ganar (2-1) y asentarse en la tercera posición de la tabla. Depredador.
Lorenzo Insigne. Pese a la derrota en el duelo directo, el Napoli parece que vuelve a ser el único que puede seguir, de lejos, a la Juventus. Y gran parte de la culpa del inicio casi perfecto de los partenopeos la tiene Insigne, en plena forma. Siete goles en estas primeras semanas de competiciones confirman su magnífico momento, que volvió a demostrar saliendo desde el banquillo para sellar el triunfo a su equipo frente al Sassuolo (2-0). Diablo.
PURGATORIO
Suso Fernández. Tras el rodaje, el rodillo. En el Milan se está empezando a entrever cuál puede ser el mejor nivel del equipo y el extremo español es clave en cualquier éxito rossonero. Dos goles contra el Sassuolo y tres asistencias frente al Chievo certifican el buen momento de Suso Fernández, culminado con la convocatoria con España. Puñal.
Parma. El retorno de los crociati a la élite del Calcio no puede ser más positiva. Cuatro victorias en los últimos cinco partidos -la última frente al Genoa (1-3)- sitúan al Parma en la mitad alta de la tabla, cumpliendo con las expectativas de una plantilla construida para evitar sufrir tras el paso por el infierno. La solidez defensiva, la fortaleza de los medios y la efectividad en ataque son las claves de un equipo muy bien cimentado. Tranquilidad.
INFIERNO
Empoli. El prometedor debut del equipo toscano en esta Serie A se quedó ahí, y el Empoli no ha vuelto a ganar desde entonces. El gran talento de sus mediocampistas contrarresta su casi nula experiencia en la élite, pero sus momentos de buen juego no son suficientes para sacar puntos en un torneo tan competitivo, como se volvió a ver en su derrota frente a una Roma que concedió demasiado (0-2). Bisoños.
Domenico Criscito. Las magníficas sensaciones del Genoa en ataque, con su estilete Piatek como estrella, contrastan con el desastre defensivo del Grifone cada jornada. Lo mismo se puede aplicar para Criscito, de retorno como capitán: perfecto en sus internadas en ataque y sus centros, un coladero en defensa. Por su banda se forjó la derrota en esta jornada frente al Parma (1-3). Agujero.
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