No hay mayor bendición para un entrenador, que tener un jugador polivalente en sus filas, un jugador que tiene el valor de un comodín, que puede salir de su zona de confort, jugar varios partidos durante la temporada en una posición que no es la suya, y cumplir.
Pero Sergi Roberto está a otro nivel, en el Barça de Luis Enrique ha rendido hasta en ocho posiciones (interior zurdo, interior diestro, mediocentro, extremo diestro, extremo zurdo, lateral diestro, lateral zurdo, incluso de “falso 9” en alguna ocasión), es decir, exceptuando los dos centrales, el delantero centro, y obviamente el portero (aunque todo llegará) ha jugado absolutamente de todo.
El rol de Sergi en Barcelona ha sido progresivo, hasta llegar a ser hoy el lateral derecho titular del Barcelona, e incluso a estar convocado y ser titular por la selección española de fútbol, ha pasado temporadas en las que no tenía minutos, y no tenía peso en la plantilla.
Esta semana, el Barça jugaba 2 jornadas de liga en una semana, miércoles y sábado, frente al Atlético y Sporting de Gijón respectivamente.
Frente al Atlético de Madrid, partido muy difícil, pero su labor fue sensacional, cada incursión que realizaba por la banda derecha generaba peligro letal, centros precisos (uno de sus factores desequilibrantes), en defensa impecable, solvente, rápido e inteligente en la anticipación, además de hacer una cobertura destacable ante un peligroso Ferreira Carrasco. Su influencia en el juego se vio claramente rebajado en cuanto su socio de banda derecha, Leo Messi, se marchó lesionado del campo. En definitiva, su trabajo fue impecable.
Ante el Sporting, en el Molinón, nadie dudó de que fue el mejor del encuentro, con una clara y destacable diferencia. Nuevamente, sus subidas por la banda derecha, que fue suya durante todo el encuentro, generaban un peligro constante, con precisos centros y pases, que eran letales en la generación de ocasiones de gol. También es destacable su trabajo defensivo, donde prácticamente siempre cumple, a pesar de haber jugado casi toda su carrera en el centro del campo, donde no tenía que hacer un trabajo defensivo en especial.
Realizó los pases que precedieron a los goles de Rafinha y Arda, de manera directa, y de Neymar de manera indirecta, tras un centro perfecto a Paco Alcacer, que dio al larguero, y el brasileño remató al rechace.
Sergi ya es el máximo asistente de la liga, y pocos se acuerdan de Dani Alves. Conseguir que el Camp Nou se olvide de uno de los laterales más valorados de la historia de la entidad blaugrana, no es una tarea precisamente sencilla. Pero hay un dato que ayuda a entender como lo ha logrado: En cuatro jornadas, el canterano lleva las mismas asistencias que Alves en toda la pasada liga.
Sergi Roberto es otra de las muchas perlas que ha salido de la cantera blaugrana, otro de esos jugadores que ha reconvertido un entrenador de la casa, Luis Enrique, con verdadero éxito, con su primer experimento efectivo y completamente exitoso. Como hizo Guardiola con Mascherano.
En la selección española, también dejó huella de la mano de su polivalencia, y es que, pese a ser convocado para reforzar la banda derecha, jugó frente a Liechtenstein como centrocampista, aunque avanzaba a posiciones más ofensivas para recibir entre líneas, además de repartir juego con una facilidad increíble.
Y es que, ya sea en el centro del campo o en el lateral, el catalán siempre cumple, y es prácticamente imposible encontrar a un jugador así en el mercado, así que, todo apunta, a que será fundamental durante muchos años en Barcelona.
Así es él, así es el que Lucho define como “el mejor lateral para el Barça». Así es el jugador que puede servir como ejemplo de que, con sudor, y sin dejar de creer, con paciencia y trabajo, puedes conseguirlo todo.
Trabajo, constancia, talento y dedicación. Nada pasa por casualidad.
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