El verano es esa estación del año en la que la palabra Monchi no deja de ser tendencia. Un año más, el Sevilla FC tiene que reinventarse al verse obligado a perder a sus jugadores más determinantes. Krychowiak, Banega y por último Gameiro, causan baja en un equipo cuya espina dorsal volverá a ser completamente novedosa.
Si en anteriores temporadas fueron Rakitic, Bacca, Alberto Moreno, Negredo o Jesús Navas, este año es el turno de otros futbolistas que han tenido un papel principal en las últimas temporadas como sevillistas. El llamado modelo del éxito ha permitido al club de Nervión sanearse económicamente sin perder de vista los objetivos deportivos. Durante la última década, el Sevilla FC ha logrado ingresar 430 millones de € (desde 2006 hasta la actualidad) sumando la friolera de 9 títulos y 14 finales, con 2 más por jugar en los próximos días (Supercopa de España y de Europa). No hay dudas, si hay un club capaz de reinventarse año tras año, es el club de la capital andaluza, si hay un hombre capaz de invertir el dinero percibido en ventas para volver a confeccionar una plantilla capaz de mantener el nivel del año anterior, es Ramón Rodríguez Verdejo, Monchi.
Pero cada año, dos preguntas empiezan a adquirir peso y sentido en la ciudad sevillana. La primera, enfocada al futuro del mejor director deportivo en España y uno de los más valorados del mundo. El día que no esté Monchi, ¿será capaz del Sevilla de mantener su status deportivo en Europa?. La segunda, motivada por la ambición de una afición que ya no se conforma con igualar los méritos conseguidos en años anteriores. Si el Sevilla FC no vendiese cada año a los mejores, ¿podríamos ver al equipo luchando por La Liga o jugando año tras año en Champions League?
Son dos preguntas que a día de hoy, no tienen respuesta. El director deportivo del Sevilla FC es Monchi, y mientras que él esté al mando, parece que el Sevilla FC seguirá actuando de la misma forma que le ha llevado a estar entre los equipos más temidos de Europa, y entre los más ejemplares en cuanto a modelo económico. Pero hay algo evidente, si hay un club que puede confiar en su dirección, ése es el Sevilla FC. Si hay un hombre en el que se puede confiar a la hora de cambiar cromos, ése es Monchi. El riesgo está ahí, pero con el ‘león de San Fernando’, el riesgo se minimiza.
Y como no existen otras alternativas, y como el modelo que ha funcionado es el que está en vigor, no queda otra que creer. Creer que Ben Yedder puede superar los 29 goles que anotó Gameiro el año pasado como sevillista (porque el francés también superó los registros de Bacca), creer que Jovetic defenderá con mayor honor la camiseta del Sevilla FC que Immobile (algo no complicado), creer que la resurrección de Nasri puede ser más sorprendente que la de Banega, creer que la entrega de Mercado aportará más que la de Krychowiak. Creer en Monchi.
