Síguenos de cerca

Otros

Rodgers puede ser el siguiente

Hubo una época, que creo que ya empieza a ser lejana, en la que se podía dar por hecho que un entrenador iba a tener crédito en Inglaterra. Era la famosa paciencia a la que aludían todos los comentaristas de fútbol cuando el envite que narraban no daba más de sí, el típico cliché para salvar una retransmisión. Todavía correteaban por la liga gerifaltes como Ferguson o Wenger, técnicos con plenos poderes en entidades que ya levantaban pasiones por todo el mundo. Eso se acabó.

La llegada de inversores extranjeros, algunos de dudosa procedencia, ha convertido a la élite en una selva en el que solo sobrevive el más fuerte. Lo que hiciste en el pasado sirve de poco. No importa que, como Brendan Rodgers, hayas levantado una FA Cup, jugado unas semifinales europeas y luchado varios años consecutivos por puestos de Champions League. Es evidente, tampoco hay que ser un lince, que su Leicester City se está resquebrajando por todos los lados. La falta de inversión es un hándicap en una liga en la que un equipo recién ascendido es capaz de firmar a 21 jugadores en una ventana de transferencias. Eso es así.

Además, tener un buen entrenador con un proyecto exitoso en un club como los foxes, es un problema. Dejad que me explique: a Youri Tielemans, por ejemplo, le vino perfecto fichar en su día por la entidad del King Power Stadium para crecer. Sin embargo, ha llegado a la edad en la que le toca dar el salto y ahora es Rodgers el que se rasga las vestiduras. Ya se fueron Fofana y Schmeichel. Solo han firmado a Wout Faes mientras el público le despide con pitos. Los números de este inicio son dantescos: un punto de quince posibles.

Lo más preocupante, más allá de la puntuación, es que el propio Rodgers ha reconocido que el objetivo este año es salvarse. ¿Qué pensará James Maddison? Él también cumple con ese perfil de jugador que atrae interés de otros equipos y si la dinámica sigue siendo la de vender para no fichar pronto pedirá un traspaso. De hecho, ya ha jugueteado con marcharse a Tottenham o Newcastle últimamente. El primero en caer fue Scott Parker, que acababa de ascender al Bournemouth a la Premier. El siguiente, perfectamente, podría ser Rodgers. La sensación de injusticia, aun así, será enorme.

Imagen de cabecera: @LFCF

Martorell (Barcelona), 1996. Periodista freelance. Amante del fútbol y loco por la Premier League. En mis ratos libres intento practicarlo.

Comparte la notícia

No te lo pierdas

Más sobre Otros