Los acontecimientos no por previsibles dejan de ser destacables. Ocurre con frecuencia que quedan en segundo plano aspectos que damos por hechos, lo cual podría restar valor a los mismos. Algo así puede estar ocurriendo con Rubén Castro, delantero de la UD Las Palmas. Con su fichaje por el conjunto canario, la mayoría presuponía que el punta anotaría goles con suma facilidad y que se convertiría en uno de los máximos goleadores de la categoría, y quizá por ello no se pone en valor su momento de forma.
Rubén Castro es un goleador insaciable. Lo ha demostrado allá donde ha posado sus botas. Fue en Huesca donde comenzó a tener un papel importante, y allí ya anotó 14 goles en Segunda con el conjunto oscense. Exactamente la misma cifra que alcanzó la siguiente temporada con el Rayo Vallecano, también en la categoría de plata. Fue en 2010 cuando aterrizó en el Real Betis, aún en Segunda División, y sus 27 tantos en Liga fueron determinantes para el ascenso de los verdiblancos a Primera. Con el conjunto sevillano consiguió marcar un total de 136 goles en competición liguera en un total de 260 encuentros. Unas cifras mareantes para un delantero atípico por su altura pero que logra anotarlos de todos los colores.
Con 37 años, ha regresado a su ciudad natal, ha vuelto a su tierra. Existen multitud de casos de jugadores que no fueron ni mucho menos profetas en su tierra, pero con Rubén el éxito parecía asegurado pese a su edad. Se han disputado 5 encuentros de la temporada en la Liga 1|2|3 y el goleador canario ya suma 6 dianas, sólo una desde el punto de penalti. Los números asustan, pero el eco no se escucha demasiado alto. Es la consecuencia de que la expectativa fuese tan alta con él.
Y lo era porque con Castro no podía ser de otra manera. Con el Betis jamás bajó su cifra una temporada de los 10 tantos, siempre que estuvo toda la temporada en el equipo. Un ratón del área, caracterizado por su velocidad y aderezado por virtudes como el regate, la inteligencia, el conocimiento del juego y los espacios y, sobre todo, por el olfato. Sí, ese intangente que tienes o no tienes y que te permite diferenciarte como un especialista del gol o no lograrlo.
La UD Las Palmas ha confeccionado una plantilla con todos los ingredientes para luchar por el ascenso directo, pero sin duda su estrella reside en el área y se mueve en ella como si estuviese en su hogar. Y esto, en una categoría tan igualada como lo es la de plata, puede suponer el punto diferencial para lograr objetivos.
Definen a las fragancias como aquellos aromas especiales que además poseen la cualidad de la durabilidad. Por ello no es descabellado definir a Rubén Castro como la fragancia del gol, con su aroma inagotable. Una fragancia que disfrutar en la competición más igualada del panorama nacional. Disfruten del gol, recréense con Rubén Castro.
Imagen de cabecera: La Liga
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