A no ser que el jugador sea una estrella en el equipo, a los grandes clubes les cuesta echar de menos a sus futbolistas. Mucho tiene que destacar para que, de manera continuada, tanto el equipo como los aficionados se acuerden de sus filigranas. Sin embargo, entre los más pequeños ocurre a la inversa: por muy poco que haya aportado es más habitual que a los seguidores les venga el nombre a la cabeza.
Kenan Kodro (San Sebastián, 1993) anunció hace unos días que su intención era salir de Osasuna. Con pasaporte bosnio, ha debutado con Bosnia en la Absoluta y sus dirigentes le avisaron de que si tenía opciones de ir al Mundial de Rusia de 2018 solo pasarían por competir en la máxima categoría. Por eso, al final, ayer Osasuna hizo oficial que traspasaba a Kodro al Mainz 05 alemán. El club rojillo jugará el Segunda la temporada que viene.
Kenan #Kodro firma con el #Mainz05 por 4⃣ años. ¡Dobrodošli! ¡Ongi etorri! ¡Bienvenido al #M05 Kenan! ???? ⚪️???? pic.twitter.com/i0Xpvz0UQO
— Mainz 05 Español (@mainz05_es) 26 de junio de 2017
Kenan Kodro llegó a Osasuna procedente de las categorías inferiores de la Real Sociedad, donde su padre hizo un buen papel. El delantero reforzó a Osasuna Promesas en Segunda B y con el descenso del primer equipo ha Segunda División Kodro pasó a formar parte de la primera plantilla.
De menos a (mucho) más
Su progresión en Osasuna se aprecia a simple vista por el número de goles. En su primera temporada marcó 2 y en la última 7 –un total de 15 en 80 partidos durante tres temporadas–. Sobre todo ha destacado en la recién finalizada 16/17, donde ha pasado de ser el cuarto delantero a colarse más de una vez en la alineación titular o tener el mejor promedio de goles por minutos. Entre Rivière, Riera, Sergio León y él, Kodro era el mejor.
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En los equipos pequeños resulta más fácil de decir eso de que «un delantero tiene que marcar goles y ya está». Kodro lo ha cumplido muy bien esta temporada, pero también ha mejorado en otras muchas cosas, esas que ahora se le pide a un delantero centro. Antes torpe con el balón, ha ganado calidad técnica y, por ende, asociativa. Y más que un nueve fijo en punta, ha aprendido a moverse, a caer a las bandas y a generar espacios para sus compañeros. Es fácil que Kodro pueda jugar con otro punta arriba y, además, descargarle de trabajo, pues el bosnio aporta mucho trabajo de tres cuartos de campo en adelante.
Kodro será un jugador recordado por el club y la afición. Más allá de sus goles y compromiso, él dio la victoria en Girona a Osasuna, donde los rojillos ascendieron a Primera División. Por ello Kenan Kodro ya es un jugador histórico en Osasuna y el que más echará de menos la afición de los cuatro delanteros con los que ha contado el equipo en la última temporada.
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