Tras la ola de bromas que ridiculizaron el nuevo busto del futbolista Cristiano Ronaldo en el aeropuerto de la isla portuguesa de Madeira, el autor de la obra salió en defensa de su creación. «A Cristiano le gustó», afirmó Emanuel Santos en declaraciones a la radioemisora ‘Rádio Renascença’. El busto de bronce fue descubierto ayer en presencia de jugador, en una ceremonia realizada en el aeropuerto de la localidad de Santa Cruz cerca de Funchal, la capital de la isla en la que el delantero del Real Madrid nació hace algo más de 32 años. El aeropuerto lleva a partir de ahora el nombre del futbolista.
En el acto, cuatro veces Balón de Oro dijo sentirse «feliz y honrado» por el homenaje que le rindió su tierra natal. En las redes, el controvertido busto se convertía entretanto rápidamente en blanco de burlas, debido a su dudoso parecido con el astro luso. Santos reveló que Cristiano Ronaldo vio la escultura durante el proceso de creación. «Cristiano había visto las fotos que le mandó el hermano. En el museo de Ronaldo, el hermano me mostró luego lo que escribió Cristiano, y me di cuenta de que le gustó».
Cristiano Ronaldo, agregó el escultor, «sólo pidió que fuesen alteradas ligeramente algunas arrugas que le dan cierta expresión al rostro». «Él opinó que las arrugas le hacían más viejo, por ello pidió que el rostro quedara más liso y más jovial». Santos no quiso comentar las críticas. «Aún no tuve tiempo de sentarme y leerlas. Pero la verdad es que en cualquier trabajo uno puede recibir críticas. No se puede agradar a todo el mundo. Una escultura es una escultura, y una fotocopia es una fotocopia», concluyó.