Stan Wawrinka ha puesto el colofón a dos semanas de tenis en Nueva York. En la final del Abierto de Estados Unidos, ante el defensor del título, Novak Djokovic, el suizo ha levantado su tercer Grand Slam en tres finales y se ha puesto a la altura de Ashe, Kuerten, Kodes y Murray con tres Majors.
Este sábado, Wawrinka jugaba apenas su tercera final de un Grand Slam. Las dos anteriores, las ganó ante el nº1 vigente: en Melbourne 2014 ante un Nadal mermado y en Paris 2015 ante Djokovic. Y en Flushing Meadows tenía que repetir hazaña para alzar el título. En sus tres finales, el tenista suizo no partía como favorito y probablemente esta circunstancia haya sido fundamental.
En Nueva York, tras ceder un primer set que necesitó del desempate para decidirse, Stan empezó a despegar. Tras empatar la final, el tercer set se planteó crucial. Lejos de arrugarse ante el escenario que se presentaba, Wawrinka sacó todo su repertorio hasta el 7-5. El suizo estaba a un set de su primer US Open. La tercera manga planteó de nuevo otro punto de inflexión. Servicio suizo con 3-1 arriba. Djokovic paró el partido pidiendo asistencia médica por ampollas en los pies. A la reanudación, Novak tuvo una bola de rotura y la posibilidad de meterse de nuevo en el partido. Sin embargo, Stan supo lidiar en la cuerda, salvar el momento, poner el 4-1 y volar hacia el título.
Con saque de campeonato, Stan se vio con 0-30 en contra. De nuevo, volvió a sacar el animal que lleva dentro y a la segunda bola de torneo, se puso a la altura de Arthur Ashe, Gustavo Kuerten, Jan Kodes y Andy Murray con tres trofeos de Grand Slam. Y en el caso de Stanimal, conquistados en diferentes plazas por lo que está a un Wimbledon de ganar el Grand Slam y colocar su nombre junto a Budge, Laver, Nadal, Perry, Federer, Emerson y Agassi.
Tras la actuación de anoche, Wawrinka pide a gritos un reconocimiento del que se le priva continuamente. Empezando por la interminable sombra de Roger Federer y siguiendo por el potencial arrasador del conocido como Big4 (Federer, Nadal, Djokovic y Murray por orden de Grand Slams conquistados), el papel de Stan los últimos años ha sido considerado secundario cuando en realidad lleva tres temporadas ganando al menos un Grand Slam.
Desde el arranque de la temporada 2014, Wawrinka no conoce la derrota en una final. 11 títulos en 11 ocasiones que ha alcanzado la última ronda, incluyendo los tres Grand Slams que ya tiene en su palmarés. Y ganando finales a Federer, Nadal y Djokovic. De 2005 a 2013, su bagaje en finales ATP era de 4-9. El cambio es radical.
Comparado con el propio Big Four en finales de Grand Slam Nadal ha caído en tres finales de Wimbledon, Federer en cuatro en Paris, Murray en cinco en Melbourne y Djokovic en otras cinco en Nueva York. Si, para perder una final hay que jugarla, pero Wawrinka lleva ganadas tres de tres en tres escenarios diferentes.
Stan sale de Nueva York como nº3 ATP y clasificado para las Finales de Londres. Pero sobre todo, sale como un grande. Sale de Nueva York cuestionando lo que ha sido una realidad los últimos años: la hegemonía del Big 4. Y quizás ése ha sido el gran problema de Wawrinka. Ha tenido que pelear y convivir en su etapa profesional con cuatro leyendas vivas de su profesión como Roger, Rafa, Novak y Andy. Pero desde este domingo, ya mira a Murray a la cara. Al menos en lo que a Grand Slams se refiere. Pero los Grand Slam sólo son el título más importante en la temporada tenística. Las cosas por su nombre. Stan is The Man: Ever tried, ever failed, no matter. Try again, fail again, fail better.