Jornada cinco de la fase de grupos de la Champions. Algo que va implícito en ella es la disputa de partidos realmente decisivos. Con solamente dos encuentros por delante, estos puntos en juego pueden ser, y en muchos casos son, definitivos para la clasificación a octavos. Como segundos clasificados de su grupo encontramos al Villarreal.
Si bien ‘el submarino’ no está en su mejor momento de forma, su posición en Champions League los respalda. Ocupan el segundo puesto del grupo F, empatados a puntos con el primer clasificado, el Manchester United, que casualmente es su próximo rival. Dos puntos por debajo encontramos a la Atalanta de Gasperini, último rival de los de Emery en la fase de grupos. Por último y con opciones prácticamente nulas de clasificar, encontramos al Young Boys, con tres puntos tras vencer al United en la jornada 1.
El Villarreal está en una situación que, tras el sorteo de grupos, seguramente habría firmado. Dependen de sí mismos en un grupo bastante complejo, con dos rivales de peso y habituales de las competiciones europeas. Pero, evidentemente, lo de esta noche no será sencillo. El Villarreal viaja con bajas, muchas y de peso. Gerard Moreno, que sigue lesionado, es una de las más notables, mientras que Serge Aurier tampoco podrá formar parte del equipo pues no está inscrito en la plantilla de la Champions League. Por otro lado, Paco Alcácer, Danjuma, Capoue y Sergio Asenjo son duda y probablemente no estarán disponibles. Tristemente, a esta lista hay que seguir añadiendo nombres pues Unai Emery confirmó que Coquelin, Yeremy Pino y Chukwueze continúan con molestias tras el encuentro frente al Celta de Vigo del fin de semana, partido en el que los tres entraron desde el banquillo en el segundo tiempo.
Por su parte, el Manchester United enfrenta el partido con un lavado de cara del que todavía se están secando. Tras el baño recibido en el estadio del Watford (4-1), Ole Gunnar Solskjaer fue destituido como entrenador y Michael Carrick tomó el puesto de manera temporal mientras se concreta la llegada de un director técnico de garantías, un escenario ciertamente similar al vivido en Barcelona las últimas semanas. Sin prácticamente días para entrenar bajo las órdenes de Carrick, los ‘red devils’ se encuentran en un momento bastante turbio. Pese a ello, tienen jugadores capaces de solventar cualquier partido aunque la carga táctica no sea de peso. Es lo que hemos visto en las pasadas jornadas de la Champions pues, entre otros, Cristiano Ronaldo está siendo el rescatador absoluto del equipo: anotó el gol (0-1) en la derrota por 2-1 frente al Young Boys en la jornada 1, anotó para llevarse la victoria frente al Villarreal en el minuto 95 en Old Trafford, anotó el gol de la victoria en el minuto 81 frente a la Atalanta en el partido de ida y, en la vuelta, empató hasta en dos ocasiones el partido (min 45+1 y 90+1). Además, desde el equipo ‘red’ han confirmado las ausencias de Raphael Varane, Paul Pogba y Mason Greenwood por lesión, mientras que Luke Shaw y Edinson Cavani son duda por inconvenientes físicos y probablemente tampoco participen.
Lo cierto es que CR7 está fuera de control y es la única razón por la que el Manchester United sigue vivo en la Champions. Un fichaje de garantías que rinde del primero al último encuentro. Nada nuevo sobre Cristiano.
Son momentos difíciles en Manchester. La inestabilidad está presente y las turbulencias son fuertes. Lo que se preveía desde hace algunas semanas está sucediendo, algo que puede jugar en favor de los de Emery. El Estadio de la Cerámica deberá empujar como pocas veces se ha visto ya que un United moribundo sigue siendo un rival temible y una victoria es casi un billete a los octavos de final. Es tu momento, submarino.
Imagen de cabecera: Villarreal CF