Hablar de Ivan Perisic y Croacia es viajar en el tiempo. Es recordar la Eurocopa de 2016, cuando Croacia ganó a España en la fase de grupos, justamente con un gol suyo que llegó rozando el final del partido. Aquella andadura del conjunto balcánico no tuvo demasiado futuro. La Portugal de Fernando Santos les apeó en la prórroga de los octavos. Esa campeona fue rascando resultados con el sufrimiento pegado a la espalda; penaltis en cuartos ante Polonia y campeones en el tiempo extra frente a Francia.
Sobre todo, es traer a la memoria el Mundial de 2018, donde el equipo croata estuvo a punto de escribir algo muy grande a los mandos del perenne Zlatko Dalić; quien dirige el combinado arlequinado desde 2017. Francia se desquitó de la anterior final europea en la gran prueba mundialista y superó a aquella selección que levantó pasiones y tuvo más creyentes que ateos. Ivan Perisic también marcó en aquella cita; un jugador que siempre aparece en los días señalados. A las puertas de la gloria. El sueño de Croacia se rompió en pedazos, pero ese combinado quedó intacto en nuestros recuerdos.
Tras su gran paso por aquel Mundial, Croacia llegó a la Euro de 2020 con muchas expectativas. Sin embargo, no pasó de octavos. España la eliminó en un partido que se alargó en la prórroga y en el que no estuvo presente Perisic; el delantero había dado positivo en coronavirus y fue baja en el encuentro. Sin embargo, en Qatar volvió a firmar un gran torneo quedándose en la antesala de la final. Argentina le despidió para ser campeona del mundo. Cero títulos, distintos capítulos meritorios a lo largo de los años de Modric, Perisik, Rakitic, Kramaric y compañía. Como para olvidar a Croacia.
La inmortalidad de Ivan Perisic es un hecho. Anoche, ante la poderosa Francia, asistió a Budimir y ratificó la victoria antes del descanso con una volea cruzada. El de Split fue clave una vez más; otro día en la oficina. Veteranía, versatilidad, desborde, velocidad, golpeo. Capacidad para generar peligro, servir envíos, y compromiso para sudar hasta la última gota. Un trotamundos que en su penúltima etapa fue cedido por el Tottenham y regresó al equipo que se formó como futbolista, el Hajduk Split. Tras quedar libre, el PSV, con la temporada iniciada, se hizo con sus servicios para que el croata siga deleitando con su eterno talento. Resistencia balcánica, longevidad. Los viejos rockeros nunca mueren. Afinado, su rock and roll sigue sonando allí donde va.
