Las que algún día fueron. Las que somos. Las que serán. Somos todas una. Queriendo lo mismo, deseando lo mismo y luchando por ello. Y todo ha cambiado con respecto a unos años, lo sabemos, pero aún falta un largo camino por recorrer y no podemos quedarnos con esto. Aún quedan muchas cosas por mejorar, por profesionalizar. Una lucha constante por conseguir nuestros derechos. Desde fuera piensan que buscamos cobrar lo mismo que los chicos. Y se equivocan. No pedimos eso. No pedimos ganar sueldos estratosféricos. Pedimos tener unas condiciones de trabajo dignas y apropiadas para cada división. Unas condiciones dignas como tienen cualquier trabajador en cualquier otro ámbito.
Y aunque hay clubes y entidades que están apostando por ello, muchos otros se quedan atrás. Y al final es lo de siempre. En pleno año 2021, donde nuestra liga iba a pasar a ser profesional, compañeras desamparadas sin atención sanitaria, sin recursos humanos y materiales y sin ser valoradas como deben serlo. Es triste que esté pasando esto, que sea noticia, que las jugadoras tengan que amenazar con una posible huelga para poder seguir avanzando. Porque queda muy bonito anunciar la profesionalización pero después no actuar en consecuencia de ello. Así que, aquí seguimos, luchando por lo mismo, por seguir avanzando, por un futuro digno, por un fútbol femenino en condiciones.
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Imagen de cabecera: @Sara1Serrat