Un sueño hecho realidad

Los sueños están para cumplirlos. Por ello hay que
perseguirlos con garra, fe, trabajo y talento. El camino nunca es fácil, pero
si nos armamos de tenacidad, fe e ilusión, posiblemente alguna que otra lágrima
de frustración y desengaño acabe convirtiéndose en dosis rebosantes de
felicidad plena. En Valdepeñas saben bien de lo que hablo.

Allí, en la localidad ciudadrealeña, se ha forjado un fuerte
vínculo con uno de los deportes más bonitos que existen: el fútbol sala. Un
proyecto sólido, conducido por gente con ideas muy claras y un objetivo aún más
evidente: llegar a lo más alto.

En los últimas temporadas, el FS Valdepeñas ha sido uno de
los conjuntos más destacados de la Segunda División del fútbol sala nacional.
De hecho, los manchegos han tenido varias veces en sus manos la oportunidad de
dar la campanada y, por ende, el salto a la máxima categoría. No obstante, por
desgracia, la suerte les había sido esquiva. Sin embargo, ni el equipo ni su
afición han bajado los brazos en ningún momento, y lo que es mucho más
importante, no han dejado de creer. Su empeño, por fin, ha tenido recompensa.

Esta campaña, que aún no ha terminado, ya ha dictado
sentencia. El FS Valdepeñas, que ha registrado unos números francamente
sensacionales: 17 victorias, 7 empates, únicamente 4 derrotas, 63 goles en
contra y 105 goles a favor; se ha consolidado de forma definitiva en lo más
alto de la clasificación, consumando así el tan ansiado y codiciado ascenso a
la Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS).

Toda
una familia, porque verdaderamente se comportan como tal, hoy está de fiesta.
Los ‘vinateros’ ya son de Primera. El sueño se ha hecho realidad. Ellos se
volcaron y apostaron por el fútbol sala, y ha sido el fútbol sala el que les ha
dado la mayor de las alegrías.