En muchas ocasiones, las historias cuentan con un personaje principal, que es el encargado de captar toda la atención, y con otro que siempre le acompaña y cumple con su acometido sin hacer mucho ruido. Claros ejemplos de ello son Sherlock Holmes y Watson, Don Quijote y Sancho Panza o Batman y Robin.
Pues bien, Ángel Di María es el ejemplo perfecto del coprotagonista en el mundo del fútbol. Di María es el futbolista que brilla en las sombras. Nunca ha sido la estrella de su equipo ni de su selección. Estuvo en la sombra de Cristiano Ronaldo en el Real Madrid, en la de Zlatan Ibrahimović y Neymar Jr en el PSG y en la de Messi con la selección argentina, pero a pesar de ello, su presencia en los clubes que ha jugado siempre ha sido de vital importancia.
Sin hacer mucho ruido, ‘El Fideo’ ha dejado huella en casi todas las finales que ha disputado a lo largo de su carrera deportiva. La última marca que dejó fue en la final de la Copa del Mundo frente a Francia, en la que generó un penalti y marcó un gol para la albiceleste. A pesar de las muchísimas críticas que se ha llevado a lo largo de su carrera por parte de la prensa y aficionados, Di María ha sabido mantener la calma hasta convertirse en múltiples ocasiones en el héroe inesperado.
Para empezar, Di María ha conquistado cuatro títulos con Argentina. El primero de ellos fue un oro olímpico en 2008. ‘El Fideo’ marcaba en 1-0 decisivo frente a Nigeria y escribía así su primera página dorada con la albiceleste. El segundo episodio glorioso tuvo que esperar. Argentina y Brasil disputaban la final de la Copa América en el Maracaná, un partido en el que Di María iba a marcar único tanto del partido y por ende, el gol que les hacía campeones.
El año siguiente se diputaba la primera Finalissima de la historia. Un partido que enfrentaba al campeón de la Eurocopa y al campeón de la Copa América, en este caso, Italia y Argentina. El partido terminó 0-3 a favor de los sudamericanos y como no, Di María marcó un golazo.
Para terminar su viaje con la selección, el episodio más reciente: la final de la Copa del Mundo. Durante los minutos que estuvo en el terreno de juego, fue el mejor del encuentro. Generó el penalti que posteriormente se iba a convertir en el primer gol del partido y marcó el segundo tras una jugada maravillosa.
Ya a nivel de clubes, en las temporadas 2008/2009 y 2009/2010, Di María gana dos Copas de la Liga de Portugal con el Benfica, pero su participación en ambas finales no acapara protagonismo. De hecho, en la primera de ellas, el jugador argentino partió de suplente y no participó en la tanda de penaltis.
Más adelante, ‘El Fideo’ ficha por el Real Madrid, equipo en el que llega a ganar cinco finales, siendo protagonista en cuatro de ellas. La primera es en la temporada 2010/2011. Barcelona y Real Madrid disputaban la final de la Copa del Rey y, en el tiempo extra, Di María dio la asistencia para el gol de Cristiano, el único tanto del partido. Al año siguiente, en 2012, Barcelona y Real Madrid se volvían a ver las caras, esta vez en la Supercopa de España. En el partido de ida, el jugador argentino partía de suplente, aunque su entrada fue clave, pues marcó el segundo gol para los blancos. El partido terminó 3-2 para el Barcelona, pero en la vuelta, el Madrid ganó por 2-1. Finalmente, el título se lo llevaron los de la capital.
En la temporada 2013/2014, Di María iba a ganar dos títulos más. El primero de ellos fue una Copa del Rey frente al Barcelona, donde el argentino se encargó de abrir la lata. Finalmente, el partido terminó 2-1 a favor del Real Madrid. El segundo título que iba a conquistar Di María era la Champions League. A pesar de no marcar en ese partido, su presencia en el verde fue vital, pues dio una asistencia y se proclamó MVP del partido.
Ángel Di María iba a conquistar un trofeo más con el Real Madrid, la Supercopa de Europa, pero no iba a jugar ese partido.
Tras su estancia en la capital de España, Di María se mudaba al país vecino y fichaba por el PSG, equipo con el que iba a ganar varios títulos e iba a seguir siendo protagonista en algunas finales.
En 2016, Ángel Di María iba a dar una asistencia en la final de la Copa de Francia frente al Olympique de Marsella, iba a marcar un gol en la Copa de la Liga frente al Lille y finalmente, iba a dar otra asistencia en la Supercopa de Francia contra el Olympique de Lyon.
Al año siguiente, en 2017, Di María iba a repetir los tres trofeos que ganó en 2016. Sin embargo, su protagonismo se iba a centrar en la Copa de la Liga, pues iba a marcar un gol e iba a dar otras dos asistencias frente al AS Mónaco. Finalmente, el partido terminó 1-4 a favor de los parisinos.
Ya en 2018, ‘El Fideo’ iba a seguir apareciendo en las finales. Marcó un gol en la final de la Copa de la Liga e hizo un doblete en la Supercopa de Francia. Su racha no iba a parar, pues en 2019 siguió siendo protagonista en las finales, aunque en alguna que otra menos decisivo. Perdió la Copa de Francia frente al Rennes en un partido que dio una asistencia. Sin embargo, iba a marcar y ganar la Supercopa de Francia, también contra el Rennes.
Su racha en las finales con clubes parecía llegar a su fin, pues fue en 2021 cuando apareció por última vez en una final con el PSG. Di María dio una asistencia en la final de la Copa de Francia de 2021 contra el Mónaco. Un partido que concluyo 0-2 a favor de los parisinos.
Ahora es jugador de la Juventus de Turín. No sabemos si seguirá siendo protagonista en finales con su club. Sin embargo, si yo fuera Massimiliano Allegri, no dudaría ni un segundo en ponerlo de titular si se trata de alguna final. Ángel Di María es el jugador que te resuelve los partidos sin hacer mucho ruido. Si alguien lo necesita, estará en las sombras. No dudéis en llamarlo.
Imagen de cabecera: GettyImages
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