La Juventus ya se encuentra a solo ocho puntos del Scudetto. Los que le falta por sumar para sellar matemáticamente el triunfo en Serie A. La Signora certificó su intratable liderato al vencer en el primer partido estelar de la 31ª jornada a la Lazio. En un partido dominado absolutamente por la Juve, los tempraneros goles de Tévez -capocannoniere con 18- y Bonucci fueron suficientes ante el gris equipo dirigido por Pioli.
No solo pinchó la Lazio, también sus rivales conciudadanos de la Roma, por lo que ambos quedan empatados en la segunda posición con 58 puntos, a 15 de la Juve. De penalti se adelantó Totti, de penalti empató Denis para Atalanta, bajo la sonora protesta del Olímpico. Este hecho lo aprovechó el Napoli, en su semana fantástica, para ponerse a cinco puntos de Champions tras golear en Cagliari con tantos de Callejón, Gabbiadini y un autogol de Balzano.
El otro gran partido de la jornada era el Derby della Madonnina, entre Inter y Milan. “Gran” por la historia de ambos, porque el presente es el que se vio en San Siro. Dos equipos con una dolorosa pobreza técnica y táctica. El Inter dominó territorialmente y tuvo las mejores ocasiones, con dos goles anulados y un aluvión de paradas de Diego López. Oportunidades que llegaron más por demérito del rival, un Milan que apenas se dignó a presentarse, que no jugar, en la segunda parte.
Solo el Palermo ganó también en esta jornada, de la mano de un inconmensurable Čočev -otro acierto de fichaje rosanero-, que anotó un gol y asistió a Dybala en otro ante el Genoa, donde volvió a anotar Falque. El resto, empates: a uno entre Chievo y Udinese (Pellissier y autogol de Cesar) y entre Sassuolo y Torino (Berardi y Quagliarella, ambos de penalti), a dos entre Empoli y Parma (Maccarone, Tonelli, Lodi y Belfodil) y a cero entre Sampdoria y Cesena.