Serena Williams, que a sus 40 años sigue en la pelea por llegar a los 24 grandes que tiene Margaret Court, fue sorprendida ayer en una pista central engalanada para la ocasión. Volvía la estadounidense al lugar que tantas alegrías le ha dado. Sin embargo, desde el principio, no se encontró cómoda en el envite. Harmony Tan en el tie break del último set, rompió el corazón de los acérrimos seguidores de la estadounidense. «No sé si será mi último Wimbledon. No puedo dar una respuesta a eso», dijo la tenista.
Williams, que dejó claro que le «encantaría que esta no fuera su última vez en la central de Wimbledon», destacó que dio todo en la derrota de ayer: «Hice todo lo que pude hacer. Tal vez mañana podría haber dado más. Tal vez hace una semana podría haber dado más. Pero hoy fue lo que pude hacer. En algún momento, tienes que poder estar bien con eso», aseguró a los periodistas.
Pese a la gran decepción de este último torneo, dejó caer que su intención es estar en el US Open. Volver a su casa es un buen acicate para seguir entrenando: «Cuando estás en casa, especialmente en Nueva York ya que ese es el lugar donde gané un Grand Slam por primera vez, siempre es especial. Siempre hay motivación para mejorar y jugar en casa«, concluyó.
Imagen de cabecera: @Wimbledon