Sé lo que hicisteis el último verano

Verano en Sevilla. Sol y calor. Huida masiva a las playas
cercanas de Huelva y Cádiz. Época de fichajes. Para la dirección deportiva –o
dirección de fútbol, que se llama ahora-, el periodo estival es un examen de selectividad.
Tras un tiempo trabajando, ha llegado la hora de tomar decisiones, de ejecutar
los conocimientos adquiridos meses atrás.

La pasada temporada, Óscar Arias se limitó a acometer
incorporaciones con poco riesgo. Banega o Jesús Navas son ejemplos de nombres
que rondaban la cabeza de todos. Junto a ellos, renovaciones de hombres de
siempre como Pareja o Carriço. Sin embargo, la poca dosis de ingenio resultó
jugar en contra del sucesor de Monchi. Kjaer, Pizarro, Nolito o Muriel fueron
fuertes inversiones que han estado lejos de la versión esperada. En enero, una
vez más, tiró de agenda para recuperar nombres como Roque Mesa o Sandro. La
única muestra de creatividad fue la de buscar a Vincenzo Montella como
alternativa a Berizzo. De nuevo, el riesgo venció a la lógica.

CAPÍTULO DE BAJAS

En la portería, y con la renovación de David Soria avanzada,
la salida de Sergio Rico parece inevitable. Con una cláusula de rescisión de 40
millones de euros, la Premier League parece un mercado óptimo para exigir al menos
la mitad del valor del portero de Montequinto. En defensa, Carriço o Lenglet
podrían abandonar el barco por motivos bien diferentes. El portugués extendió
su contrato la pasada temporada pero su rendimiento en el último curso ha sido
nulo. Por su parte, el central galo ha sido una de las revelaciones en La Liga
y el Barcelona parece dispuesto a pagar los 38 millones de euros de su
cláusula. En los laterales no habrán demasiados movimientos. A la espera de ver
la producción de Guilherme Arana a las órdenes de Pablo Machín en la
pretemporada. El brasileño podría ser el único en salir cedido. Carole
regresará al Galatasaray mientras Layún puede continuar si se llega a un
acuerdo con el Porto.

En la medular, el primero en salir será Guido Pizarro.
Tigres pagará más de 8 millones de euros por su pase, abonados en dos cuotas.
El Sevilla FC recupera la inversión que hizo hace 12 meses por  el futbolista argentino. Una gran gestión.
Ganso debe ser el siguiente. Johannes Geis vuelve al Schalke 04 tras su cesión
y Steven N’Zonzi podría salir definitivamente tras dos años vendiéndose al
mejor postor. Su participación en el Mundial de Rusia será clave. En cuanto a
los hombres ofensivos se refiere, si llega una oferta fuera de mercado por
Joaquín Correa, saldría. Mientras tanto, se busca un equipo que apueste por
Luis Muriel tras el año decepcionante del fichaje más caro de la historia del
club.  

CAPÍTULO DE ALTAS

Reforzar las áreas debe ser el objetivo prioritario. Un
guardameta seguro, fiable y con nivel para afrontar partidos trascendentes. Un
delantero capaz de marcar más de 20 goles por temporada y que necesite pocas
ocasiones para materializarlas. Un rematador de área que estuvo ausente en la
temporada que acaba de finalizar. Pacheco o Areola son los primeros nombres en
salir para la portería. Bas Dost o Raúl de Tomás, los primeros contactados para
el puesto de delantero. Primordial acertar en ambas posiciones.

Las salidas de Lenglet y/o Nzonzi obligan a fortalecer el
centro de la defensa y el centro del campo. El Sevilla FC parece tener claro que
ejercerá la opción de compra por Roque Mesa, pero aún faltaría un hombre en la
medular poblada que previsiblemente tendrá Pablo Machín. Marcos Llorente sigue
estando en la agenda.

El periodo estival es largo, pero no tanto para el Sevilla.
Tres eliminatorias de EUFA Europa League y una final de Supercopa,
probablemente a partido único. Por todo ello, y por lo que se hizo el último
verano, no hay que perder tiempo para reestructurar una plantilla que debe
recuperar el gen competitivo para volver a estar entre los cuatro mejores de La
Liga.