Dice el dicho que segundas partes no son buenas, la vida, el cine y el deporte no son excepción a este refrán popular que viene a decir que no vuelvas del lugar que te fuiste por la puerta de atrás o del que te echaron con una sonrisa burlona. La absurda norma de la Federación Española de Baloncesto [FEB] por la que ningún entrenador en activo de las competiciones organizadas a nivel nacional, puede ser elegido como seleccionador nacional hace que el rango de entrenadores se reduzca hasta volver sobre decisiones pasadas como la de traer de vuelta a Sergio Scariolo.
La vuelta a Sergio Scariolo es la vuelta a un baloncesto más pragmático, posesiones más largas y en la que el talento, a menudo, parece encorsetado en esquemas rígidos. La dirección y la búsqueda de soluciones en los partidos que se complican ha sido una de las debilidades de Scariolo durante su estancia con la Selección, que pocas veces ha podido reconducir encuentros con rachas negativas. En su anterior etapa a los mandos de la selección nacional llegó a dar la impresión que Scariolo era un mero entrenador para gestionar esfuerzos, ya que los sistemas de ataque se mandaban desde la pista en la que tanto Calderón o Navarro ejercían de líderes para nutrir la superioridad interior del equipo nacional frente a cualquier otro equipo europeo. Se llegó a extender una teoría en prensa de una autogestión por parte del equipo tras la derrota ante Turquía en el Eurobasket de 2009, siendo cierta o no esta afirmación lo que marcó esa derrota fue el punto de inflexión en el que la selección dio la vuelta a una situación que parecía abocada al fracaso consiguiendo el oro.
La primera etapa de Sergio Scariolo como entrenador de España vino precedida del adiós de Aíto García Reneses tras la disputa de los JJOO de Pekín. Pepe Sáez firmó al italiano como líder mientras Scariolo compaginaba su estancia por la estepa rusa en un proyecto económica y deportivamente atractivo en Khimki con el nuevo cargo de seleccionador nacional.
El proyecto se inició con dudas en el Europeo de 2009 disputado en Polonia, las dos fases de grupos dejaron incertidumbre en una selección netamente superior al resto de equipos participantes en la competición. La selección española sufrió derrotas frente a Serbia y Turquía que complicaron el acceso a la fase final de la competición. La derrota frente a los turcos fue especialmente dolorosa y criticada por la gestión de la última jugada del encuentro cuando España se encontraba dos abajo y Scariolo marcó la jugada para que un recién llegado como Sergio Llull se jugará la suerte de la selección en el encuentro. La pelota no entró en la penetración del balear y España perdió el partido y se quedó sin margen de error para todo el torneo. La frase posterior de Marc Gasol tras el encuentro fue una crítica al planteamiento de Scariolo en esa jugada: “Si se las juega el último en llegar, pasan estas cosas”. La frase de Marc, el orgullo de los jugadores o la ‘autogestión’ de los pesos pesados llevó al equipo a un cambio de actitud que les sirvió para ganar el resto de partidos. La fase final del torneo fue espectacular, España barrió a Francia en cuartos de final (+22), a Grecia en semifinales (+18) y a Serbia en la final (+22). En ese torneo fue elegido como MVP, Pau Gasol y en el quinteto ideal además del pívot, fue elegido Rudy Fernández.
El Mundial de 2010 de Turquía comenzó con la misma irregularidad que el anterior Europeo, Scariolo seguía sin encontrar el juego fluido mostrado en la fase final del Europeo 2009 y las dos únicas pruebas de cierto nivel fueron saldadas con sendas derrotas que complicaron los cruces de la fase final. Francia y Lituania derrotaron a España en la primera fase, aunque con la configuración final del grupo se evitaba el cruce con Estados Unidos hasta una hipotética final. Esa final nunca llegaría porque España cayó derrotada ante Serbia en la venganza del anterior Europeo. El ya famoso triple lejano del talentoso Teodosic dejó a España fuera de la lucha de las medallas.
En el Eurobasket de 2011 que se disputó en Lituania. La primera fase solo tuvo un sobresalto en la última jornada con la derrota frente a Turquía, la primera plaza estaba asegurada antes del comienzo de esa jornada con lo que sirvió para dar descanso a algunos de los jugadores que más minutos estaban disputando en ese Europeo. La segunda fase de competición, otra fase de grupos, se resolvió sobresalientemente derrotando a Alemania, Serbia y Francia. España cogió la primera posición de ese grupo y llegó a los cuartos de final con el favoritismo de su lado. Al igual que ocurriera dos años antes, España fue superior a sus rivales en esta fase final de competición y derrotó a Eslovenia (+22) en cuartos de final, a Macedonia en semifinales (+12) y en la final a la Francia de Tony Parker (+13) llevándose Scariolo su segundo oro consecutivo en Eurobasket.
La reválida final y último torneo de Scariolo, llegó en los JJOO de Londres en 2012, una nueva oportunidad de conseguir batir al ‘Team USA’. De nuevo el torneo dejó a la vista las carencias de la etapa Scariolo. En las primeras fases del torneo siempre perdía ante el mínimo escollo de dificultad. Cerca estuvo Gran Bretaña de hacer un ‘Angolazo’ ganando España por un punto, días después, Rusia ganó a España y en la última jornada del grupo, y con cierto paripé, España volvió a perder contra Brasil para asegurarse no enfrentarse a Estados Unidos hasta la final. En la fase final, la defensa de la selección subió un punto la intensidad para ganar desde la defensa primero a Francia (+7) y después vengando la derrota de Rusia en semifinales (+8). En la final, el equipo dio la cara ante la potente selección norteamericana que se llevó el partido por 107 a 100 dejando de nuevo a la selección Española con la plata como ya pasó en Pekín cuatro años antes. Tras los Juegos Olímpicos, Scariolo presentó su dimisión y se quedó Juan Antonio Orenga como sucesor tras ser ayudante durante parte de su época en la Selección.
Desde el pasado septiembre, el equipo nacional falto de competición se encontraba en un proceso interno de búsqueda del candidato idóneo que lleve, una vez más, al equipo a cosechar las metas propuestas y llevar un proceso de transición en la que la ‘Generación de Oro’ vaya colgando las botas paulatinamente y sus relevos se vayan adaptando a la alta competición. El perfil elegido por José Luis Sáez, presidente de la FEB ha sido de nuevo el de un entrenador veterano conocedor del baloncesto europeo y español. El entrenador de Brescia vuelve a España tras su última y mala experiencia bajo la dirección del Saski Baskonia.
Para conseguir la meta principal, la clasificación para los JJOO de Brasil del verano que viene, el entrenador no podrá contar con la baja asegurada de Ricky Rubio, el base de El Masnou ha tenido un año repleto de lesiones que apenas le han permitido disputar partidos con regularidad en Minnesota, su última operación tras la finalización de la temporada le impedirá estar este verano con la selección nacional. El estado de Juan Carlos Navarro y Pau Gasol es una incógnita, los estandartes de la selección en la última década pueden descansar para preparar su último asalto al oro de Río de Janeiro. Marc Gasol tendrá que decidir su futuro como agente libre en la NBA y tendrá la cabeza en encontrar un buen contrato que colme sus aspiraciones deportivas y económicas. Otros dos NBA, como José Calderón y Serge Ibaka tendrán muy difícil su concurso, y es probable que se unan a una lista de bajas que de solo pensarlo asusta el reto en este europeo.
En el caso de que Ibaka decida no participar, el hueco podría ser ocupado por Nikola Mirotic, el hispano-montenegrino ha sido uno de los ‘rookies’ más destacados del curso y su impacto en la NBA ha sido positivo. Junto a Mirotic y la unidad exterior del Real Madrid (Sergio Rodríguez, Sergio Llull y Rudy Fernández) podrían unirse nombres como Álex Abrines, Pau Ribas, Pablo Aguilar, Víctor Claver o Willy Hernangómez que pueden dar un descanso a alguna de las estrellas de esta Selección.
