Todo equipo que se precie debería armarse desde una sólida defensa. Hay jugadores cuyo destino es el de ser grandes zagueros. Un claro ejemplo de ello es el trío de centrales integrado por los italianos Barzagli, Bonucci y Chiellini. Desde que Antonio Conte implantase el flamante sistema 3-5-2 en la Juventus, éstos tres socios llevan 6 años constituyendo la zaga de referencia del fútbol italiano y europeo. Pero el balompié tiene fecha de caducidad. El bueno de Andrea Barzagli, con 35 años, tiene cada vez más cerca su retirada. Giorgio Chiellini, con 32 años, y Leonardo Bonucci, próximo a la treintena, aún podrán aportarnos buenos años de fútbol. Es indudable que el trío de la Vecchia Signora y de la selección italiana pasará a la historia por conformar una defensa de leyenda.
Muchos pueden pensar que el vacío que dejarán será irremplazable. Especialmente para el devenir de la Azzurra. Sin embargo, tres jóvenes centrales ya opositan a ser los defensores del Estado italiano. La conocida `BBC´ podría mutar en la `RRC´. Hablamos de Rugani, Romagnoli y Caldara.
Daniele Rugani, de 22 años, es internacional en todas las categorías y recientemente ha debutado con la absoluta. Hacía ya años que en el fútbol base se venía hablando del canterano del Empoli. Precisamente con el equipo toscano empezó a destacar. Fue elegido mejor jugador de la Serie B en la temporada del ascenso (2013/14). También fue pieza clave de la permanencia del conjunto de Maurizio Sarri en la Serie A 2014/15. Prueba de ello son sus 78 partidos disputados -77 de manera íntegra- y sus 5 goles anotados. La solidez defensiva puede ser sinónimo de pulcritud en el juego. Rugani actúa como un ladrón de guante blanco en defensa. Así quedó reflejado en su temporada de debut en la máxima categoría, en la cual no recibió ni una sola tarjeta en 38 encuentros.
Ortodoxo con el balón e intuitivo en ambas áreas. Su destacado expediente le sirvió para fichar por la Juventus a cambio de 3,5 millones de euros. Desde entonces, está recibiendo un máster avanzado tutelado por los tres socios mayoritarios antes mencionados. Un privilegiado que está aprovechando su falta de minutos con la humildad del que quiere aprender de los mejores. Ahora, ante las continuas bajas de Barzagli y Chiellini, está demostrando que puede tener un hueco en el conjunto bianconero y postular para ser el futuro de la selección nacional.
Por su parte, la defensa de Millanello tiene nuevo líder: Alessio Romagnoli. Una propuesta arriesgada -debido a sus 21 años- a la par que acertada. El joven zagero está dejando buenas sensaciones en el Olimpo de míticos defensores (véase Maldini, Baresi, Costacurta o Nesta). Avalado por el histórico giallorosso Bruno Conti, el canterano romanista tuvo su oportunidad durante dos temporadas en la AS Roma. En la temporada 2014/15 fue cedido a la Sampdoria, en la cual presentó sus credenciales disputando 30 partidos y marcando 2 goles. Hecho que no pasó desapercibido para el AC Milan, quién aportó la friolera cifra de 25 millones de euros para hacerse con sus servicios. Fue a petición del técnico que apostó por él en el conjunto blucerchiato, Sinisa Mihajlovic.
Es un jugador de habilidad técnica y visión de juego debido a sus inicios como mediocentro. Ello justifica su desparpajo para salir con un buen desplazamiento del cuero. Con una zurda de calidad, juega en el flanco izquierdo de la defensa; pudiendo adaptarse a la posición de lateral en momentos de necesidad. Central de envergadura, destaca por su juego aéreo. Sus carencias de velocidad las suple con un ventajoso posicionamiento respecto del rival; si bien es cierto que con errores propios de la edad. En dos temporadas como rossonero es titular indiscutible con 47 partidos disputados hasta la fecha. Una regularidad que le ha permitido empezar a ser un habitual en la selección azzurra, en la que ha disputado 4 encuentros.
En la sorprendente Atalanta juega Mattia Caldara, probablemente el menos conocido de los tres. Tras disfrutar de dos cesiones en Cesena y Trapani -clubes de Serie B- el canterano de 22 años disputa su primera temporada en las filas del club de Bérgamo. Pese a comenzar el curso como suplente, el joven ha explotado. Con ello ha conseguido hacerse un hueco en la zaga neriazurra, aportando incluso goles importantes.
Destaca por su poderío físico, sus intercepciones de balón y por jugar sin arriesgar; al pase corto. Esto último hace que tenga dificultades para jugar la pelota ante la presión rival, aspecto en el que necesita mejorar. Asiduo en el once inicial de la Selección italiana sub 21, aún no es internacional absoluto; aunque de seguir así pronto tendrá su oportunidad.
Cuenta la leyenda italiana que las Parcas eran tres personificaciones femeninas cuya tarea era escribir el destino de todas las personas. Desde el nacimiento, determinaban el hado a través de hilos de vida. Quizás la Parca Décima, `la que asigna el destino´, entrelazase con hilos dorados la vida de Rugani, Romagnoli y Caldara para que defiendan a la Nazionale. Tres personas con notorio presente y un prometedor futuro que pueden marcar el sino futbolístico de la zaga azzurra. Giampiero Ventura (fortuna en italiano) -seleccionador nacional- tiene en su mano empezar a contar con ellos. Con ese apellido… ¿será un guiño positivo? ¿Serán tres hombres con un mismo destino?
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