En el mundo, son muchas las selecciones que pudieron tener un gran futuro pero, por diferentes circunstancias, varios de sus posibles jugadores decidieron jugar por otro país. Hace unos días os contaba la posible selección de Kosovo. Hoy, os traigo otro caso: la República Democrática del Congo.
La semana pasada debutó con la selección africana una de las mayores promesas francesas y conocido en España por su estancia en Madrid, Sevilla y A Coruña. Se trata de Gaël Kakuta, un jugador que con 17 años fichó por el Chelsea y con 24 acabó jugando en la Superliga China. Debutó contra Kenia, siendo titular y marcando de falta directa el día de su debut.
Los Leopardos, cuentan con jugadores de gran calidad. Entre ellos resaltan el delantero del Villarreal, Cedric Bakambu, y el extremo del Everton, Yannick Bolasie. Pero hay más: Chancel Mbemba, del Newcastle; Neeskens Kebano, del Fulham; Paul-José Mpoku, del Panathinaikos; o Dieurmerci Mbokani, del Hull City forman parte de una selección que crece año tras año.
Su mejor once está valorado en 69 millones, incluyendo a Steven N’Zonzi. El centrocampista, pese a que fue incluido en la última convocatoria, aún no ha decidido si jugará con la selección africana. El jugador del Sevilla, con familia congoleña, es uno de los múltiples casos de jugadores franceses o belgas que podrían jugar por la selección de Florent Ibengé.
Eliaquim Mangala, futbolista del Valencia e internacional francés, es hijo de congoleños. Pese a que nació en Colombes, un suburbio de París, realizó toda su carrera deportiva en Bélgica, país que pudo llegar a defender. Otro caso similar es el del portero Steve Mandanda, ahora defendiendo los colores del Crystal Palace. Nació en Kinshasa, cuando aún era Zaire. Él eligió el país que le acogió desde que tenía diez años. En cambio, uno de sus cuatro hermanos, Parfait, portero del Charleroi, defiende los colores de la selección africana.
En Kinshasa también nació uno de los grandes delanteros del fútbol europeo, Christian Benteke. Su padre, que era militar, decidió que su hijo no debería vivir bajo la dictadura de Mobutu y se marcharon a Lieja, donde vivían algunos familiares de Benteke. Pese a que según sus propias palabras, se siente «tan belga como congoleño» defiende los colores de la selección entrenada por Roberto Martínez.
En Bélgica existen varios casos de renombre. Los hermanos Lukaku, Jordan y Romelu, podrían jugar en la selección del país africano, ya que sus padres son de origen congolés. Michy Batshuayi, pese a que nació en Bruselas y pasó los mejores momentos de carrera en el Standart de Lieja, su ascendencia congoleña le permitía jugar con la selección de la zamarra azulona. Christian Kabasele nacido en Lubumbashi llegó a ser convocado por la selección africana en 2015 pero finalmente Marc Wilmots lo seleccionó para jugar la Eurocopa. Vincent Kompany, capitán de la selección belga y de padre congolés, o el defensa Jason Denayer, de madre congoleña, son otros ejemplos de jugadores que podrían haber jugado la Copa África con la selección nacional de la República Democrática del Congo.
Con todas estas estrellas, la selección de Ibengé sería la mejor del continente africano, con mucha diferencia. Con un once valorado en 200 millones de euros, la selección contaría con los jugadores de mayor calidad: Lukaku, Benteke, N’Zonzi, Kompany , Bolasie o Mandanda formarían parte del once inicial de un equipo de leyenda. Por si fuera poco, en el banquillo contaría con jugadores como Michy Batshuayi, Gael Kakuta, Christian Kasabele, Paul- José Mpoku, Youssuff Mulumbu o Dieurmeci Mbokani.
La selección de la República Democrática del Congo, ya no solo sería la mejor del continente africano, sino que podría competir de tú a tú contra prácticamente todas las selecciones del mundo. Su mejor once sería mejor que el de selecciones como Colombia (150 millones), Chile (161 millones), Holanda (171 millones) o Polonia (200 millones).
Desde que Zaire pasó a ser la República Democrática del Congo, el país africano nunca llegó a disputar un Mundial de fútbol. Esta selección, plagada de estrellas, y bajó la capitanía de Youssuf Mulumbu, tendría todas las papeletas para entrar en la gran competición intercontinental.
Este sería el once ideal de la República Democrática del Congo: